Cristina Barrous, experta en nutrición: "Enseño a mis hijos a comer disfrutando"

Cristina Barrous empezó su vida profesional como diseñadora de interiores, pero el destino tenía algo diferente preparado para ella y hace escasos años comenzó su trayectoria como 'coach' alimenticia. Actualmente, dirige Barrous, una empresa especializada en ayudar a mantener una buena relación con la comida y a sentirse bien, a través de sus conocimientos como técnica de nutrición y mentora nutricional en psiconeuroinmunología. 

En esta ocasión, en el podcast de magasIN en el Español se juntan Charo Izquierdo y Cruz Sánchez de Lara para hablar de Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), sanación, referentes en la vida y educación y formas de ver el mundo. Un encuentro "entre amigas", como dicen sus creadoras, que busca lidiar con el "bombardeo de mensajes nazis sobre la comida" a los que las mujeres nos enfrentamos cada día.  

Tratando de alejar a sus hijos de este mundo 'tóxico' de mala alimentación y problemas a los que puede derivar, Barrous trata de enseñar a sus hijos cómo tener una relación saludable con la comida desde la diversión. "Ellos saben la comida que es mejor para su cuerpo y la que no es tan buena", comentaba la nutricionista. 

[La experta en nutrición Cristina Barrous: "Sufrí bulimia mucho tiempo y la comida me sanó"]

Cristina Barrous lucha por hacer que todos tengan una buena alimentación empezando por sus hijos a los que, dentro de lo posible, trata de ofrecerles siempre opciones saludables. Aunque intenta constantemente optar por ese camino, ha decidido dirigirse hacia la felicidad y solo preocuparse por aquellas cosas que realmente puede controlar. 

En ese sentido, señala que no mira el menú del colegio porque "es una mierda" y no quiere preocuparse de ello si no puede cambiarlo. Asimismo, a pesar de que Barrous no le da chuches a sus hijos en casa, es consciente de que sí hay en los cumpleños. Por ese motivo, y sabiendo que sin su presencia sus hijos se alimentan peor, trata de encauzar su camino para que estos conocimientos hagan mella en ellos y, en algún futuro "miren al mundo con otros ojos" en el que el físico no sea el centro.