"Todas tejemos una bandera común con diferentes hilos y un propósito"; esta frase resume el espíritu de este importante proyecto liderado por Cristina Delgado, fundadora y presidenta de Women in Retail. Nació en junio de 2023 con la misión de influir en el entorno, mejorando las condiciones que permitan que todos los profesionales del retail —hombres y mujeres— tengan las mismas oportunidades para alcanzar el éxito profesional.
"Nuestra misión es la de promover y auspiciar la presencia de mujeres en los órganos de decisión de las empresas de retail para enriquecer con perspectivas distintas y complementarias que mejoran la forma de liderar y de gestionar. Este enriquecimiento tiene un evidente impacto positivo y diferencial en la animación y liderazgo con los equipos, en la cuenta de resultados de las empresas, así como en la responsabilidad social y sostenibilidad de las mismas", explica Delgado.
Women in Retail reúne a más de 170 mujeres líderes en la industria, de diferentes sectores restauración, cosmética, moda, deporte, joyería… Nadie mejor que ellas para liderar la revolución, ya que el 85% de los profesionales del retail son mujeres, aunque paradójicamente hay muy pocas empresas lideradas por ellas. Un contrasentido que Delgado y el resto de las impulsoras de esta plataforma quieren cambiar.
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Los referentes son importantes para crear el cambio y ella lo es: tiene dos décadas de experiencia en la dirección de empresas en las principales multinacionales como Decathlon, MediaMarkt… Además de ocho años en el corporativo de Prosegur en 17 países. ¿El punto fuerte para alcanzar el éxito? Visibilizar el talento, que es lo que hace WiR. Así se gesta la revolución.
Partimos de algo tan obvio como la necesidad que tener una red de contactos profesionales que conozcan tu trabajo no solo para ascender en el escalafón, también para reinventarse o cambiar de empleo llegado el momento. Si no te conocen, no existes.
"Esta es la primera comunidad de mujeres del B2C (de la empresa al consumidor) y considero que era algo muy necesario. Las relaciones sociales profesionales son la esencia de la parte comercial, pero cuando trabajas en una corporación lo haces hacia adentro y tienes la sensación de que no necesitas una comunidad que te dé visibilidad. Entonces lo que pasa es que cuando haces una transición en tu trayectoria y sales de la empresa en la que estás, te das cuenta de que no tienes imagen de marca personal respecto de la industria", nos explica Delgado.
La visibilización del talento es el punto de partida. "Históricamente, las mujeres no hemos entendido que el networking es una parte esencial de la actividad profesional. Nos cuesta hablar de nuestro trabajo… Y es fundamental especialmente a partir de los 45 años, que en el mundo del retail es la edad a la que sueles salir de las corporaciones. Para poder dar el salto a otros proyectos es necesario tener una reputación externa, no solo interna. Las mujeres no están acostumbradas a visibilizar su talento, en eso tenemos que aprender de ellos, de los hombres. La comunidad WiR nace de esa necesidad. Solo la visibilización te lleva a posiciones de liderazgo".
Las profesionales del retail es mayoritariamente femenino, pero el sector no está liderado por ellas. "El 85% del retail somos mujeres, pero solo el 17% de las empresas están lideradas por mujeres. La presencia femenina en los puestos de liderazgo es un tema de justicia y de estadística", asegura. Entre las causas de este difícil acceso a los puestos de liderazgo, además de la poca visibilidad, está el eterno caballo de batalla de la conciliación.
"El retail tradicionalmente ha sido un sector muy demandante en lo que al tiempo de trabajo se refiere, se trabaja de lunes a domingo. Por eso, muchas mujeres a partir de los 35 años se han retirado voluntariamente de las posibles promociones o ascensos. La sociedad ha cambiado y el retail se está flexibilizando para poder permitir que hombres y mujeres compatibilicen trabajo y vida personal y poder seguir prosperando profesionalmente. Aún hay que impulsar el cambio y la mejora y ese cambio tiene que venir de nosotras las mujeres, al ser la mayoría del sector. Nosotras somos el bisturí del retail", dice con convicción.
Obviamente, las políticas para avanzar en conciliación son importantes y han de estar dirigidas a hombres y mujeres para acabar naturalmente con sesgos. "Hay que hablar de maternidad y paternidad y hay que favorecer la natalidad porque si no la sociedad se acaba. Si no se establecen políticas de ayuda, muchas mujeres deciden no tener hijos porque no hay apoyo el día que necesites hacer un parón profesional para ser madre. Tener hijos no te quita la ambición profesional", prosigue.
La escasa presencia de las mujeres en puestos de poder "no es un tema de talento, porque si no tuviéramos talento no estaríamos trabajando en la industria. Hay que poder analizar de dónde venimos y hacia dónde vamos y observar los cambios, que ya se están produciendo. Desde WiR trabajamos para generar un impacto en el sector y que se flexibilice".
"Muchas veces, las decisiones que toman los hombres hacen mucho más por la igualdad en las empresas que años de trabajo y lucha de las mujeres. Simplemente con ir a recursos humanos a pedir la baja por paternidad de cuatro meses con toda la tranquilidad del mundo ya están ayudando mucho a las mujeres. Eso cada vez va pasando más y antes eso era impensable. Esto cambia completamente las reglas del juego", asegura Delgado.
Pero no solamente eso, hay que cambiar concepciones erróneas y cargas a veces autoimpuestas que pueden ser muy limitantes. "La ambición es fundamental, mejorar tus propias marcas, no competir con los demás de manera bellaca, que es lo que tratan de trasmitir a veces cuando las mujeres son ambiciosas. Esto nos va a permitir escalar y entrar en las quinielas. Dentro de esa carrera nosotras mismas también tenemos que quitarnos ese alto nivel de exigencia e hiperperfeccionamiento, que lo veo mucho en las mujeres. No es inseguridad, es que queremos hacer todo perfecto y hay que aprender a delegar. El camino hacia el liderazgo va por el hecho, no por el perfecto", dice.
Ella no ha tenido hijos, pero como el resto de los profesionales sí una vida personal que combinar con la profesional. "Llegar a todo es imposible, porque el tiempo es finito y un proyecto no se lidera en remoto. Hay que perdonarse, yo me perdono todos los días por esas cosas que no he podido hacer para no explotar. Las estadísticas lo dicen, muchas mujeres están medicadas y tienen problemas de salud mental porque no llegan a todo. Hay que delegar, en el trabajo, y también en casa. El equilibrio, como me dijo una vez Isabel Tocino, es imposible".
Los referentes femeninos para inspirar al resto de mujeres y favorecer la igualdad es otro de los puntos importantes para la fundadora de WiR y su comunidad de mujeres. ¿Faltan o simplemente están invisibilizados? Más lo segundo, en su opinión; vuelve a cobrar importancia el hacer esa labor de darle voz e impulsar el talento.
"Yo creo que sí hay muchos perfiles de mujeres que pueden ser referentes, también en áreas que son menos conocidas como la logística, seguridad, tecnología… Lo que pasa es que no son tan visibles. Cuando empecé a construir la comunidad, tiré de muchísimas profesionales que conocía y a las que les dije que teníamos esa responsabilidad de cambiar las cosas. No se cuenta lo suficiente y debemos visibilizar esos referentes. Tenemos la obligación de contar nuestra trayectoria porque las que han llegado han sido las menos", asegura.
Y añade: "Por eso nosotros queremos dar visibilidad a las trayectorias no a las posiciones. De este modo, otras mujeres verán que no son las únicas que, por ejemplo, han dejado de trabajar dos años para tener hijos y luego se han reenganchado profesionalmente, etc. Dejarán de ir a oscuras. Hay que hablar de todo eso en prensa, en las universidades, con chicos y chicas tratando de que esos encuentros sean paritarios y eliminando sesgos. Al dar visibilidad lo que estamos mostrando también es normalidad y que ellos normalicen ver mujeres líderes".
Cristina Delgado cree firmemente en que hay que animar a las empresas (ellas mismas en WiR lo hacen), para buscar, encontrar y contratar a esas profesionales en sectores donde su presencia es menor frente a la plantilla masculina. "El otro día una compañera me contaba que en el colegio de su hijo no había ni una profesora de matemáticas: pues señores contraten mujeres para dar clases de ciencias con los mismos parámetros en cuanto a méritos. Hay que buscarlas y contratarlas. Quizá conozcas menos, no porque no existan, sino porque falta esa red de contactos, esa imagen de marca pública. Luchamos contra una realidad cultural de los últimos 30 años, por eso hay que acelerar esa evolución y conseguir esa paridad", asegura.
El camino hacia esa mayor igualdad es conjunto: "Dentro de WiR hay muchos hombres que apoyan esto para lograr el cambio, que debe ser en tres o cinco años, hay que acelerarlo. Mucha lucha de las mujeres es formar parte de los comités de dirección por lo que significa no por cuestiones puramente económicas". Las normas de su Código de Buen Gobierno en la Industria del Retail, que no es de obligado cumplimiento, pero sí una guía, contiene principios como diversidad en la contratación, equidad salarial, promoción interna y prevención de la discriminación, entre otros.