Desarrollo, democracia e igualdad. Tres palabras que forman parte de la vida de las tres protagonistas de esta historia. Tres ejes que permanecen grabados en sus vidas profesionales, destinadas a implementar proyectos que mejoren la vida de los demás no solo en España, sino en gran parte del mundo.
Más de treinta años de experiencia en el sector internacional, cooperación y asuntos exteriores, pasando por Naciones Unidas y por Moncloa, como asesora de temas migratorios e internacionales de la vicepresidenta primera del Gobierno.
Esa es Irune Aguirrezabal, actual directora del Programa Iberoamericano de Derechos Humanos, Democracia e Igualdad. Lo más gratificante de su trayectoria, define, es que siempre intenta hacer "una contribución que consiga transformar los problemas de las personas".
"Las mujeres no estamos en la agenda política a la par que los hombres"
El programa que dirige pertenece a la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) y tiene como objetivo propiciar la convivencia democrática en Iberoamérica; "una democracia paritaria y feminista", explica. Para conseguirlo, una de las herramientas es la cooperación feminista entre los organismos iberoamericanos. Trabajan por una igualdad real y efectiva.
Así, entre otras muchas acciones, han creado la plataforma Voces de mujeres Iberoamericanas. "Con ella damos respuesta a una evidencia: que las mujeres no estamos en la agenda política a la par que los hombres, no estamos presencialmente en las instituciones públicas y tampoco como fuentes expertas cuando, por ejemplo, los medios investigan sobre un tema o las instituciones elaboran políticas públicas", señala.
¿Grandes olvidadas?
Esa cooperación feminista que fomente el liderazgo de las mujeres en las instituciones, también se trabaja desde las entidades más pequeñas. Zaira Mesa, presidenta de la Coordinadora Andaluza de ONGD y técnica de proyectos en la ONG Entrepueblos es tajante: "Peleamos toda la vida para que las mujeres de otros países en crecimiento tengan liderazgo y se empoderen pero ¿y nosotras? Hemos sido las grandes olvidadas de la cooperación".
Según datos de la Agencia Española de Cooperación para el Desarrollo (AECID) casi 2.600 españoles se dedican a ello. No obstante, el perfil medio de las personas cooperantes que trabajan fuera de nuestro país son mujeres mayores de 35 años.
"Es hora de que nosotras, las mujeres de la cooperación, estemos"
Mesa fue una de las tantas expatriadas a África y América Latina. Su bagaje en este ámbito es asombroso, y tiene claro todo lo que la perspectiva femenina desde el liderazgo puede aportar al sector.
Una perspectiva que después de 25 años se ha visto consolidada gracias a la nueva Ley de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y Solidaridad Global, aprobada en 2023: "Las mujeres cooperantes tenemos una filosofía clara de liderazgo femenino y de poner la vida en el centro. Con la nueva ley ya no hablamos de enfoque feminista, sino de que la cooperación, en todos sus puntos, tiene que ser feminista".
Describe que en el caso de la Coordinadora Andaluza "los comités de dirección y los pesos pesados eran hombres; bien, desde mayo del año pasado somos todas mujeres y cada vez hay más en puestos directivos. Es hora de que nosotras, las mujeres de la cooperación, estemos".
Cooperación en Latinoamérica
La AECID en su V Plan Director de la Cooperación Española refleja el compromiso de España con el desarrollo de América Latina y el Caribe. Y señala a 12 países de la región, entre los que se encuentran Bolivia, Cuba, Ecuador, El Salvador o Guatemala como prioritarios de la Cooperación Española.
Alicia García, Responsable de Comunicación de la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas (FIIAPP), trabaja para visibilizar que la cooperación no solo la realizan las oenegés:
"Somos el brazo de la cooperación española especializado en políticas públicas. Conectamos instituciones de países europeos y países socios. Llamamos a regiones de Latinoamérica, África y Asia para intercambiar conocimiento y mejorar los sistemas públicos".
El perfil medio de los cooperantes que trabajan fuera de España son mujeres mayores de 35 años
En esta línea, García explica que "Latinoamérica tiene unos índices importantes de desigualdad, por lo que la cohesión social es un enorme reto allí, como también lo es la lucha contra el crimen organizado o el cambio climático".
En la FIIAPP afrontan ese triple reto desde las políticas públicas, poniendo en marcha marcos normativos para no dejar a nadie atrás. Consideran estas políticas poderosas herramientas para reducir las brechas de género en todos los ámbitos de gobierno, ya sea en asuntos relacionados con la seguridad, clima, empleo o migraciones.
Y es que España es uno de los principales inversores en Iberoamérica y cuenta con una presencia destacada en sectores clave del proceso de desarrollo y modernización social. Como señalan desde el propio Ministerio de Exteriores, Iberoamérica ha constituido siempre una prioridad para la política exterior de España. En esta unión y cooperación el componente humano, histórico, social, cultural, político, económico y lingüístico tiene mucha importancia.
Para que esta cooperación siga dando sus frutos en las diferentes instituciones, Aguirrezabal, Mesa y García coinciden: necesitan relevo generacional. Y aunque definen que el camino es difícil, coinciden en la importancia de que haya mujeres dispuestas a dirigir esos altos cargos.
Para ello, concluye Aguirrezabal, "atrévete a discrepar. Atrévete a soñar con lo que tú quieres ser, a plantarte en el despacho de ese señor importante y a expresar tu forma de hacer las cosas. Demuéstralo".