Dalia Santiago (taekwondo),  Sara Oller (boccia), Marta Fernández (natación) y Sonia Ruiz (baloncesto).

Dalia Santiago (taekwondo), Sara Oller (boccia), Marta Fernández (natación) y Sonia Ruiz (baloncesto).

Protagonistas

Entrenando para ganar: tenacidad y superación en los Juegos Paralímpicos de París 2024

Sonia Ruiz (baloncesto), Sara Aller (boccia), Dalia Santiago (taekwondo) y Marta Fernández (natación) son tres de los 125 deportistas españoles que competirán este verano en París.

30 mayo, 2024 02:13

El deporte paralímpico ha experimentado un cambio formidable en los últimos años. Se ha profesionalizado y ha adquirido mucha más visibilidad. El tesón y la capacidad de superación de estos deportistas son un magnífico ejemplo para el conjunto de la sociedad.

[ARGADINI: “Hay que ir cambiando la mentalidad cuando se habla de 'inclusión'. Somos parte de la sociedad”]

Por ahora, 89 españoles tienen asegurada la plaza en los Juegos Paralímpicos de París 2024: baloncesto en silla de ruedas, natación, atletismo, piragüismo, boccia, taekwondo, ciclismo, remo, tenis de mesa, tiro y tiro con arco. Se espera que, hasta julio, se clasifiquen otros 30 más en diferentes disciplinas.

Sonia, capitana, presidenta y diputada

Sonia Ruiz (Murcia, 1982) es la capitana del equipo de baloncesto en silla de ruedas. Los mejores 8 equipos se enfrentarán en los JJ. PP. de París. La competición va a estar muy reñida. Sonia es también presidenta y fundadora del UCAM Murcia BSR, reciente campeón de la Eurocup-3. Además, cumple su segunda legislatura como diputada en la Asamblea de Murcia.

En la liga los conjuntos son mixtos, mientras en los JJ. PP. no. Sonia los encara con mucha ilusión. Los de Kioto fueron unos juegos extraños, tenían demasiadas expectativas. Ahora tienen más confianza y han perdido "el miedo a perder", explica por teléfono desde Murcia, horas antes de jugar un partido de liga. Se disculpa por un ataque de tos. Está cocinando con su compañero y han puesto muchas especias.

Sonia Ruiz

Sonia Ruiz

Lleva de capitana del equipo nacional los últimos doce años. Hasta el entrenador la llama 'la señora'. La edad media del equipo ronda entre los 20 y 27. Sonia se inició en el baloncesto en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, en 2002. Enseguida le gustó porque combinaba el juego en equipo con la destreza: "Tenías que botar la pelota al mismo tiempo que le dabas a la silla, encestar, esquivar a tus rivales, bloquearlos… es muy divertido y muy completo", explica. Como en Murcia no había equipo, se marchó a estudiar y a jugar a Cádiz.

Al principio eran muy pocas chicas. Nos llamaban las 'niñas', cuenta a Magas. "Peleamos mucho para que nos tomaran en serio". La fortaleza de carácter y la resistencia es herencia de su abuelo, que era minero en La Unión. Se define como una persona pasional para lo bueno y para lo malo. Agradece el apoyo de su familia cuando ha tomado decisiones arriesgadas: "Si ellos confían en mí, por qué no lo voy a hacer yo".

Sonia Ruiz

Sonia Ruiz

Como diputada opina que la misión de los políticos es hacer política útil, objetivo que se olvida por culpa de la confrontación política y lo frenético de las redes sociales. "Parece que hay que generar constantemente una polémica distinta. Vivimos en un mundo sensacionalista, donde las noticias bonitas no tienen tanta importancia como las negativas", concluye.

[La historia de las mujeres en los JJ.OO., compitiendo por la igualdad deportiva]

Sara, talante e inteligencia

En el Hospital Nacional de Parapléjicos pasó Sara Aller (Benavides de Órbigo, León, 1995) nueve meses tras un accidente de coche. Pero no conoció la boccia hasta seis años después en una Jornada de Captación en Valladolid. Tras ese día, empezó a practicar en su casa. "No podía coger las bolas porque mis manos están muy agarrotadas", cuenta a Magas por teléfono con una voz enérgica y dulce.

La boccia (se pronuncia bocha) es "un tipo de petanca para gente con discapacidad, mezclado con la estrategia del ajedrez", explica Sara. Se le ha dado tan bien que después de 3 años se ha clasificado para los Juegos Paralímpicos de París junto a su compañero de boccia, Vasili Agache. Como él vive en Gerona y ella en su pueblo, entrenan juntos unos días antes de cada competición.

Sandra Aller

Sandra Aller

El entrenador elogia su inteligencia y capacidad táctica. Sara está muy orgullosa de su trabajo. Dice que ha invertido mucho tiempo en pista, viendo vídeos en casa, con el fisio, el psicólogo deportivo… "He ido añadiendo las piezas que creí que faltaban para estar donde estoy. Pero queda trabajo. Marcarse objetivos es primordial. No hay que perder la ilusión, pero tienen que ser realistas. Si no, te puedes llevar una decepción tan grande que te haga abandonar".

Su padre siempre "ha tirado del carro en los momentos difíciles". De él saca la fuerza de voluntad y la actitud, explica a Magas: "Yo tengo una vida normal en el pueblo con mi familia y mis amigos. Bueno, soy una persona dependiente y necesito ayuda desde que me levanto hasta que me acuesto".

Sandra Aller

Sandra Aller

El deporte le ha permitido salir de la rutina de ir de su casa a León para hacer rehabilitación y vuelta. Gracias a la boccia, ha conocido mundo y a personas maravillosas. Entrena a diario en el pueblo con una voluntaria, antigua compañera de colegio: "Mis triunfos son también suyos", dice Sara, que pediría a la sociedad más empatía hacia las personas con discapacidad y seguir luchando por la inclusión.

Dalia, humildad, compañerismo y saber estar

Dalia Santiago (Gerona, 1998) acaba de llegar del Campeonato europeo para taekwondo en Serbia con la medalla de bronce en la categoría de +65kg. Está cansada y "algo espesa", dice a Magas por teléfono, pero contenta. En dos días volará a Vietnam para disputar el Campeonato Asiático.

Se podría decir que Dalia nació en un tatami. Su padre tiene un gimnasio de taekwondo y es entrenador. Al principio competía en la modalidad general. Al no tener antebrazo izquierdo era penalizada en técnica porque no podía utilizar el puño ni abrir la mano. "Siempre he hecho todo igual -explica-. A lo mejor me salía un poco diferente, pero me he podido defender en la vida".

Dalia Santiago

Dalia Santiago

En 2018 entró en el equipo nacional de para taekwondo. No fue a Tokio por la mínima, pero ya está seleccionada para París. Aspira a una medalla, "si puede ser la de oro, mejor". Está trabajando muchísimo para lograrlo. También entrena con una psicóloga deportiva técnica para controlar los nervios y saber relajarse, focalizar y evitar distracciones.

Por las mañanas, antes de entrar a trabajar en una gestoría, hace ejercicios de fuerza, y por las tardes, un entrenamiento más táctico de taekwondo. Para ella es una suerte que su padre sea su entrenador porque la conoce. A la pregunta de si se enfadan, contesta: "Los enfados no se pueden evitar. Pero siempre hemos sabido diferenciar al padre del entrenador. Nos ha ido muy bien". Él y su hermano son sus referentes en el deporte y quienes le impulsan cuando se viene abajo.

Dalia Santiago

Dalia Santiago

Valores como la humildad, el compañerismo, el saber estar, se los debe al taekwondo. Esta disciplina forma parte de su vida. Cuando ha tenido un día malo y se mete a entrenar, los problemas se diluyen. A Dalia le gustaría que los deportes tuvieran más repercusión: "Son igual de buenos y nosotros también merecemos recompensas".

Marta: la discapacidad no define la persona 

En el complejo deportivo San Amaro de Burgos, las piscinas llevan el nombre de Marta Fernández Infante (Burgos, 1994). El pasado febrero batió el récord del mundo de mariposa y se clasificó para París. Serán sus segundos Juegos Paralímpicos. En Tokio ganó tres medallas, oro, plata y bronce. Ese año fue galardonada con el León del Deporte de EL ESPAÑOL.

De pequeña tenía terror al agua. "Mis padres me apuntaron a natación -cuenta a Magas- porque era la mejor rehabilitación para la parálisis cerebral. Ahora es mi pasión". Gracias a ellos ha llegado a cumplir muchos de sus sueños. Le apoyaron cuando tomó la decisión de mudarse con 17 años al Centro de Tecnificación de Natación Adaptada en Valladolid.

Marta Fernández Infante

Marta Fernández Infante

La nadadora trabaja por las mañanas como administrativa del Estado en la Delegación de Gobierno de Valladolid y por las tardes entrena. El deporte le ha permitido conocer gente maravillosa "que forma parte de esa familia que se elige" y vivir "muchas experiencias y sueños cumplidos".

Sortea las dificultades con las que se enfrenta debido a su enfermedad degenerativa, haciendo las cosas a su manera, tal y como le han enseñado sus padres. "Aunque ha habido un avance significativo, todavía quedan muchas barreras físicas y psicológicas en la sociedad. A la famosa inclusión llegaremos cuando la discapacidad no defina a la persona", concluye Marta, que cree que todos los deportistas son un ejemplo de superación que demuestran día a día.

Marta Fernández Infante

Marta Fernández Infante

Los primeros Juegos Paralímpicos se celebraron en Roma en 1960. Los de París serán los decimoséptimos. Reunirán a 4.400 deportistas con discapacidad física, intelectual, visual y parálisis o lesión cerebral, procedentes de 182 países.

[30 aniversario: las mujeres que triunfaron en los Juegos Olímpicos de Barcelona'92]

Entre los 125 españoles, se encuentran las protagonistas de este reportaje: Sonia Ruiz, capitana del equipo de baloncesto, Sara Oller que competirá en boccia, Dalia Santiago en taekwondo y Marta Fernández en natación. Save the date: Juegos Paralímpicos de París 2024, del 28 de agosto al 8 de septiembre. No nos los podemos perder.