Con permiso de cualquier villancico existente y del Last Christmas de George Michael, la canción navideña por antonomasia es All I Want for Christmas Is You, el tema que Mariah Carey lanzó en 1994 y con el que se embolsa tres millones de dólares al año.
Teniendo en cuenta el hambre que tiene la industria musical de novedades y lo rápido que la gente se cansa de todo, el hecho de que un tema lleve 30 años sin haber cambiado nada es objeto de estudio de los expertos de marketing, que no dudan en señalar también el lado emocional de la canción.
"La capacidad de Mariah Carey para mantener la melodía significativa muestra una aguda conciencia de las estrategias cambiantes y una profunda conciencia del patrón de consumo de la audiencia. Al abarcar nuevas etapas, ha explorado con éxito el progreso de la radio tradicional a la era digital mediante el uso de las redes sociales", explican desde la agencia de marketing Digibee.
Por su parte, ella no lo duda: se lo debe (casi) todo a la nostalgia. "Al escuchar música navideña, la gente empieza a rememorar distintos momentos que ha vivido", acaba de explicar a The New York Times.
Laura Estudillo, agente de prensa especializada en música, señala que la canción es un macroéxito que cuenta además con un componente estacional que asegura su relevancia y reproducción año tras año.
"Este tema no sólo fue un éxito rotundo desde su lanzamiento en 1995, sino que alcanzó un nuevo auge años más tarde al formar parte de la icónica banda sonora del clásico navideño Love Actually, en lo que sin duda fue otro golpe de efecto estratégico para el tema. Estamos hablando del año 2003: la Generación Z apenas estaba en pañales, pero la canción ya se encontraba sólidamente arraigada en el imaginario colectivo navideño y, por supuesto, en la carrera de Mariah Carey", explica a Magas.
"Con el auge de la cultura de internet y la proliferación de los memes, Mariah Carey ha demostrado una notable inteligencia y un agudo sentido del humor para adaptarse a los tiempos. Ha abrazado por completo la cultura del meme, no sólo siendo parte de las conversaciones digitales relacionadas con su villancico, sino también ofreciendo exactamente lo que el público quiere ver: guiños, humor y autoconciencia. Su participación no es pasiva; es estratégica y deliberada, alimentando la nostalgia y el entusiasmo de cada temporada navideña", asegura.
Comenta que año tras año la cantante se asegura de capitalizar este fenómeno, renovando su relevancia a través de redes sociales y plataformas digitales, donde su presencia se convierte en el pistoletazo de salida de la Navidad.
"Su habilidad para reinventar el tema va más allá de su vigencia musical; reside en su capacidad para conectar emocionalmente con nuevas generaciones y generar una expectación casi ritualista con sus videos virales y publicaciones. Mariah ha logrado algo excepcionalmente difícil: es reconocida como la gran artista que es y se ha convertido en una figura casi mítica, una especie de 'hada navideña' que anuncia oficialmente la llegada de la temporada festiva", asegura.
"Su imagen, entre lo icónico y lo entrañable, ha cimentado su lugar como un símbolo atemporal de la Navidad en la cultura pop, asegurando que su éxito siga renovándose año tras año. ¿Seguirá este fenómeno durante mucho más tiempo? Todo indica que sí. La canción ha trascendido a su creadora; ya no es sólo de Mariah, pertenece a la gente, al espíritu colectivo de la Navidad, y eso la hace prácticamente inmortal", añade.
Como suele ocurrir con las mejores historias, esta no estaba en realidad destinada a arrancar, pues cuando a Carey le ofrecieron hacer un disco de canciones navideñas, pensó que era demasiado pronto, pues su carrera todavía no se había dilatado demasiado, como ocurre cuando a un actor le dan un premio honorífico antes de según qué edad y siente que todavía le quedan muchos años para que se le reconozca su trabajo. Pero con ayuda de un teclado Casio, sintió la melodía dentro y pensó que, en realidad, "no quería demasiadas cosas en Navidad"... Es decir: I don't want a lot for Christmas.
El resto es historia. El álbum Merry Christmas ha vendido 18 millones de copias y el 1 de noviembre, y lo hace así desde 2019, declara al mundo que han comenzado las Navidades mediante un vídeo en el que dice It's time. Nos puede molestar más o menos que los turrones aparezcan en los supermercados en pleno mes de octubre, pero si Carey quiere que las Navidades comiencen en noviembre, nadie se atreve a abrir la boca.
Porque aunque el tema siempre ha estado presente, Billboard señala que el impulso promocional y la ubicuidad del tema fueron los que ayudaron a que la canción fuera al número 1 de las listas en 2019. Mariah sabe que en tiempos de redes no basta con un buen tema: hay que ofrecer viralidad, y la reina de las fiestas y del kitsch domina la fórmula.
"Lo que distingue a All I Want for Christmas Is You es su capacidad para trascender no sólo como un villancico masivo, sino también como el himno navideño de la era del internet y de los memes. Es el villancico de este siglo, que gracias a una combinación de sinergias y circunstancias fortuitas, Mariah Carey ha sabido aprovechar con maestría. Es cierto que en algún momento podría surgir otro fenómeno musical que compita por este puesto, pero por ahora, All I Want for Christmas Is You sigue siendo el referente indiscutible de la Navidad en el siglo XXI", dice Estudillo.
En sus memorias, The meaning of Mariah Carey, la cantante explica que las Navidades de su infancia solían ser agridulces, por lo que para sobrellevarlas, intentaba ser positiva. "Me propuse crear mi propio pequeño mundo mágico y alegre de Navidad. Me centré en todas las cosas que mi madre se esforzaba por crear; todo lo que necesitaba era una lluvia de purpurina y un coro de iglesia para respaldarme", escribe la cantante.
Siempre asegura que la Navidad es su época preferida del año, y teniendo en cuenta el dinero que se embolsa a causa de All I Want for Christmas Is You, es posible que hasta el Grinch amara las fiestas. Carey quizás no quiera demasiado en Navidad, pero sin duda, su cuenta corriente recibe cada año ingentes cantidades gracias a esas noches de paz y de amor en las que, de fondo, suena siempre su tema.
Por cierto, Sabrina Carpenter presenta el 6 de diciembre en Netflix su especial navideño A Nonsense Christmas with Sabrina Carpenter, por lo que puede que tengamos ante nosotros al relevo de Mariah en materia navideña…