La escritora y articulista Susana Fortes, publica Solo un día más (Espasa), donde narra una vibrante historia de amor y pasión entre el aclamado escritor y novelista, y miembro de la resistencia, Albert Camus, y la actriz de origen español María Casares. Quince años de amor marcados por la clandestinidad, la distancia, y el intercambio de 865 cartas, con el telón de fondo de la Segunda Guerra Mundial.
En paralelo, una escritora contemporánea describe el hallazgo de esta historia y, mientras se documenta, ve en ello un espejo de su vida, llevándola a reflexionar sobre sus propios desengaños amorosos.
Susana Fortes construye un relato sobre el amor, las pasiones, las palabras y la lucha por preservar lo efímero frente al paso del tiempo, entre el París de la posguerra y el presente marcado por la memoria.
El día que 15.000 paracaidistas norteamericanos tomaron tierra en Normandía, Albert Camus y María Casares se hicieron amantes. Quince años de amor "imposible" en un enclave histórico fascinante. ¿Era irresistible no contar esta historia?
Sin duda, aparte de que ellos son increíbles. Él es un gran escritor y premio Nobel, y ella una actriz de éxito, viviendo el corazón del siglo XX. La ocupación de París, el final de la guerra, la liberación, el comienzo de la Guerra Fría... Todos esos ingredientes mezclados en una época que me fascina, y su gran historia de amor.
¿Quién era María Casares?
Una actriz muy prometedora y con mucha fuerza. Republicana, y absolutamente ninguneada durante el franquismo. Pero en Francia era la musa, la actriz del cine francés reconocida en Europa, Sudamérica, Nueva York... Era mucho más que la amante de Camus.
Tenía un carácter de mil demonios, una gallega de armas tomar. No me extraña nada que Camus se volviera loco por sus huesos.
Susana Fortes ha escrito 'Solo un día más' (Espasa).
Camus tenía éxito con las mujeres.
Sí, era un tipo muy atractivo.
La editora americana de Camus le regaló en uno de sus viajes de promoción que hacía por Estados Unidos una gabardina Burberry, igual que la que usaba Bogart en Casablanca.
Y la revista Vogue, en su versión americana, publicó a grandes titulares "The New Humphrey Bogart" y con ello una entrevista a Camus. A partir de ese momento le cayeron muchas bromas.
Su primer encuentro íntimo no sale como ellos esperaban, ¿o tal vez sí? Porque lo menos importante fue precisamente el sexo.
Es que las primeras veces casi siempre salen mal. Es muy difícil con tanta emoción y tanta pasión. A veces los nervios juegan en contra.
Albert le cuenta a María que su mujer le espera en Argelia, y a ella no le hace ninguna gracia enterarse.
Camus era tuberculoso, estaba en Francia en una cura de recuperación cuando es ocupada por los nazis y comienza la guerra. Él estaba casado con Francine que se había quedado en Argel.
Y durante ese tiempo que él permanece en Francia, es cuando se enamora hasta los huesos de María Casares. En los primeros encuentros, Camus le cuenta que está casado y a ella eso no le gusta nada, pero siguen viviendo un amor apasionado e intensísimo.
Cuando Francine regresa a Francia, María se da cuenta que no quiere ser la otra, que no quiere ser su amante, y entonces rompe la relación, porque a lo largo de los 15 años el amor pasa por muchas etapas.
Camus se desespera porque está atrapado entre su corazón y sus obligaciones con su mujer.
¿Él pensaba que tenía derecho a vivir esta historia de amor sin lastimar a nadie?
En una de las cartas que se escriben le dice muy desesperado, "que algún día se dará cuenta de que nadie nunca la ha querido ni la va a querer como él", pero ya será demasiado tarde porque habrá pasado mucho tiempo.
María era diez años más joven que Camus. Ella tenía 21 cuando se hicieron amantes y con esa edad crees que vas a conquistar el mundo y que te lo mereces todo.
Tiempo después, María se compadece. Ya es una mujer con más años, con más reflexión y más hondura y acepta el 75% de esa relación, porque se da cuenta de que no puede estar al 100%. Sabe que el 75% con Camus es más que el 300% con cualquiera.
¿Qué amor que se define como "imposible" dura quince años?
Yo no creo que fuera imposible, porque se rompe con la muerte trágica de él.
Lo que desde luego no fue es un amor convencional, matrimonial y bendecido por la Iglesia. Fue otra cosa mucho más bonita, mucho más interesante, mucho más amorosa. Creo que las 865 cartas de varios folios que se escribieron a lo largo de estos 15 años eran su manera de cubrir esos espacios que no tenían juntos. Era su forma de tocarse, de estar en la vida del otro.
El libro 'Solo un día más' explora el romance de Albert Camus con una actriz española a través de sus cartas de amor.
¿Cómo era Francine?
Una mujer extraordinaria que vivió con esto, que quería a su marido, que lo admiraba, que lo apreciaba, que era la madre de sus hijos.
Y también hizo que Camille desarrollara un sentido de culpa. En las cartas a veces hay sensación de celos, pero también por parte de María se nota un sentido profundo de compasión por lo que estaba haciendo, aunque sabía que nada podía hacer porque el amor es el amor, y no entiende de burocracias, ni estados civiles.
¿Enamorarse es un desierto que hay que cruzar con sed?
Sí, la sed es el hambre, es la pasión, es el deseo. Entonces, precisamente por no poder compartirlo todo, ese deseo es tan intenso.
¿La fuerza invencible que ha impulsado al mundo y a la literatura no son los amores felices, sino los contrariados?
Esto viene desde Shakespeare, desde Dante. Es decir, si Dante se hubiera casado con Beatriz, nos habríamos perdido la Divina Comedia.
No sé qué habría pasado si ellos hubiesen podido vivir una vida matrimonial, pero estoy absolutamente segura de que su amor que fue más intenso, y más apasionado, diferente a cualquier amor convencional.
¿Catherine, la hija de Camille, llega a conocer a María?
Sí, y se hacen muy amigas. Quedaron para presentarse en un sitio de la Provenza, se tomaron un chocolate y hablaron durante horas y horas de su padre. Y de esa conversación viene la amistad.
María tenía las cartas, y en un momento determinado de su vida, en el que atravesaba problemas económicos, le preguntó a Catherine si podía venderlas a una biblioteca. Y fue precisamente Catherine quien se las compró para después publicarlas en 2017.
¿Cómo llegan a ti las cartas?
En España se publicaron en 2023, aunque para un lector ajeno pueden resultar pesadas porque están llenas de referencias, de notas a pie de página, casi como un libro para bibliófilos o historiadores.
Lo que yo quería era saber el alma y la esencia, y acercar los personajes al lector. Que el trabajo de documentación no pesase sobre los hombros de quien lo lee, sino que entre en ese libro, se siente a la mesa y se tome un café con los personajes.
¿En qué momento decides contar esta historia?
Camus es un referente absoluto para una generación anterior a la mía. Sin embargo, a mí siempre me fascinó el personaje. Lo primero que leí fue El extranjero, y luego descubrí otros libros maravillosos.
En el momento que vi las cartas pensé en escribir las dos historias que hay en la novela. Por un lado, la historia de los amantes, y por otro la de Ana, que se ve reflejada en Camus y Casares.
¿Te gusta el género biopic?
No quería hacer un ensayo más sobre Camus, quería contar sus vidas con todos sus recovecos y sin caer en la mitificación. Para mí era un magnífico escritor, un premio Nobel, un defensor de los derechos humanos, un referente moral... pero también un marido pésimo, un padre maravilloso, un amante profundamente enamorado, un hombre que sentía celos, que estaba enfermo... Era muchas cosas.