El domingo 10 de diciembre, Oslo y Estocolmo vivían un día importante con la celebración de los Premios Nobel en estas dos ciudades europeas. Esto hizo que la respectivas familias reales de Suecia y Noruega fueran también protagonistas del evento.
En la capital sueca, los reyes Carlos Gustavo y Silvia, acompañados de la heredera Victoria, la princesa Sofía y el príncipe Carlos Felipe vestían sus mejores galas para asistir a la ceremonia en el Concert Hall donde se hizo entrega del galardón en categorías como Literatura, Química, Física o Medicina. En la capital noruega, se entregaba el de la Paz, que este año ha recaído en la activista iraní encarcelada por defender los derechos de las mujeres Narges Mohammadi. Fueron sus hijos quien se encargaron de recogerlo. Los reyes Harald y Sonia y los príncipes Haakon y Mette-Marit fueron los encargados de presidir el acto en el Ayuntamiento.
Ambas ceremonias exigían un código de equiqueta formal, pero diferente. Mientras que en Estocolmo, las Bernardotte se vestían de gala con sus joyas más fastuosas, las Glücksburg optaban por estilismos menos espectaculares pero igualmente elegantes. Los repasamos.