Todo el mundo tiene planes y una larga lista de tareas para cumplir antes de que lleguen las fiestas, si perteneces a una institución tan protocolaria como la monarquía aún más. Hay tradiciones que cumplir, muchas de ellas antiquísimas y con un vistoso ceremonial. Así preparan la Navidad algunas Casas Reales europeas como la danesa y la sueca. Hay detalles sorprendentes y también enternecedores que ya se han ido haciendo público como adelanto de lo que se vivirá en los diferentes palacios.
Una de las personas que más intensamente vive estas fechas es Margarita II de Dinamarca. Cada año, ella misma se encarga de realizar los adornos navideños para engalanar el palacio desde primeros diciembre. Confecciona pequeños duendes rojos y centros de mesa y también cumple con una tradición, mantener las velas de la corona de Adviento encendidas cada domingo.
No sólo eso, el palacio de Amalienborg (que en realidad son cuatro palacios en uno) alberga varios árboles de Navidad. El más grande se coloca en el Salón de los Caballeros y lo decoran personalmente los príncipes herederos Federico y Mary y sus hijos. Ayudados por una escalera, van colocando bolas de diferentes colores entre risas y bromas. ¡Hasta el perro de la familia ayuda!
Por su parte, Benedicta de Dinamarca, hermana de la Reina, coloca en uno de los pasillos de su hogar otro árbol mucho más discreto pero muy significativo. Así lo explican desde la Casa Real: "El pequeño abeto está decorado con bolas navideñas y otros adornos que han seguido a la Princesa durante toda su vida. Entre otras cosas, algunas flores de pascua de Suiza, donde Su Alteza Real ha celebrado la festividad muchas veces".
Curiosamente, Margarita II no pasa sus vacaciones en Amalienborg, sino en el castillo de Marselisborg, en Aarhus, donde reúne a toda la familia en Nochebuena. Faltan unos días, pero ya se están llevando todas las cosas necesarias, que no son pocas. De hecho, hemos visto salir varias maletas vintage de la prestigiosa firma francesa Louis Vuitton, cargadas por el personal de servicio.
Hay un puesto especial para esto: llamado el cazador. Es el responsable de numerosas funciones en la Corte de la Reina y se encarga, entre otras cosas, de hacer las maletas para Nochebuena. Se trata de que tanto la Familia Real como el personal que trabaja allí en esa fecha puedan respetar las tradiciones navideñas. "La función 'cazador' se remonta a mucho tiempo atrás en la Casa Real danesa. En los viejos tiempos, el cazador seguía al rey tan de cerca que era casi un guardia de seguridad personal. El cazador también acompañaba al rey en las cacerías, lo que se refleja en el título y en el uniforme verde oscuro. Sin embargo, el título ya no tiene nada que ver con la caza, como podría pensarse", explican.
A unos 1.000 kilómetros de Dinamarca se encuentra la Casa Real de Suecia, que también conserva unas tradiciones muy especiales en estas semanas previas a la Navidad. Una de ellas es la festividad de Santa Lucía, donde los hijos de la princesa Victoria son cada año protagonistas. Se celebró el pasado 13 de diciembre y tiene una bonita historia detrás que merece la pena conocer. En la ceremonia se recuerda a una santa mártir de Sicilia, cuyo nombre significa "la que porta la luz".
Precisamente de ahí viene la puesta en escena: en la procesión una de las chicas encarna a Santa Lucía y va acompañada de damas de honor y de los niños estrella. Juntos recorren las calles de los lugares donde se celebra cantando en su honor y reparten bollos de harina con azafrán y galletas de jengibre.
La princesa Estelle, futura heredera al trono, de once años, también se suma cada año a la celebración en el Castillo de Haga. Interpretando el papel principal, vestida con una túnica blanca y fajín rojo y una corona de velas, este 2023 vuelve a posar orgullosa junto a su hermano Óscar, que lleva en su cabeza el capirote estrellado de los acompañantes. La foto ha conquistado a miles de fans reales.
Es tradición también que los reyes Carlos Gustavo y Silvia reúnan a sus hijos: Victoria, Magdalena y Carlos Felipe con sus respectivas familias, en el castillo de Drottningholm para celebrar la Navidad. Además, el 23 de diciembre, previo a Nochebuena, la Reina sueca cumple 80 años, lo que hace que estas fiestas sean aún más especiales. Llegarán unos días antes para terminar de decorar el lugar, asistir a un servicio religioso y también recibir la visita de Papá Noel, que suele llegar en trineo por los jardines de palacio para dejar algunos detalles a pequeños y mayores.
En la Casa Real noruega también han colocado el árbol en el exterior del Palacio Real de Oslo y han mostrado la decoración del interior. En Buckingham (Inglaterra) el abeto luce ya en todo su esplendor. Los Windsor celebrarán las fiestas en Balmoral, como hizo durante toda su vida la recordada Isabel II, y se mantendrán todas esas tradiciones que a ella tanto le gustaban. Se han añadido otras como el concierto de villancicos organizado por Kate Middleton, Princesa de Gales, que se emite por televisión en Nochebuena y que tiene un carácter solidario.
En España, Felipe VI y Letizia, que ya han hecho pública su felicitación navideña, lo celebrarán en Zarzuela, seguramente con la emérita Sofía y su hermana Irene y con Paloma Rocasolano, madre de la Reina, que suelen acudir en Nochebuena.