El próximo sábado 6 de enero, la princesa Leonor asistirá por primera vez al acto de la Pascua Militar presidido por los Reyes de España en el Palacio Real de Madrid. Leonor acompañará a sus padres por primera vez en el que será su gran debut de 2024. En el acto, Felipe VI pronunciará su habitual discurso con el que dará comienzo al año castrense y hará también balance de los últimos doce meses.
La hija mayor de los Reyes inició a mediados de agosto su formación militar en la Academia del Ejército de Tierra en Zaragoza. Aquí, juró la bandera el pasado 7 de octubre, comenzando así el que será ya el segundo curso de su entrenamiento específico como futura capitana general de las Fuerzas Armadas.
Para la gran ocasión, la Princesa asistirá vestida con el uniforme de cadete de la Academia General Militar (AGM) de Zaragoza, uniforme que ya lució el pasado 12 de octubre, cuando asistió al desfile por la Fiesta Nacional y en la posterior recepción en el Palacio Real, con los saludos en el Salón del Trono, el mismo lugar donde tendrá lugar la Pascua Militar.
El uniforme está compuesto por una guerrera y pantalón caqui, camisa blanca de manga larga, corbata negra de nudo, pasador sujeta corbatas, ceñidor de gala dorado, cordones dorados, zapatos de cordones negros y calcetines, tal y como establece la orden ministerial de Defensa aprobada en 2016 y publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Volveremos a verla con la boina grancé de color rojo que simboliza su nombramiento como cadete y que es específica de su unidad. La obtuvo a mediados de septiembre tras completar el módulo de formación básica del combatiente del Ejército de Tierra. Es muy probable que se quite la boina para el besamanos posterior, al igual que hizo el 12 de Octubre.
El protocolo exige que las damas civiles acudan vestidas de largo, un hecho que su madre cumple a rajatabla cada 6 de enero desde 2014, en que se convirtió en reina consorte.
El origen de la Pascua Militar
La Pascua Militar tiene una profunda tradición en la vida castrense española. Su celebración se remonta al reinado de Carlos III, cuando el 6 de enero de 1782 se recuperó la localidad menorquina de Mahón, que se hallaba en poder de los ingleses.
Como expresión de júbilo, Carlos III ordenó a los virreyes, capitanes generales, gobernadores y comandantes militares que, en la fiesta de la Epifanía, reuniesen a las guarniciones y notificasen en su nombre a jefes y oficiales de los ejércitos su felicitación.
En la actualidad, se celebra con la asistencia del presidente del Gobierno y los ministros de Defensa e Interior, quienes reciben en el Palacio Real de Madrid a una nutrida representación de las Fuerzas Armadas y de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, encabezadas por los responsables del Estado Mayor de la Defensa, de los Ejércitos y la Armada, de las Reales y Militares Órdenes de San Fernando y San Hermenegildo, de la Real Hermandad de Veteranos y de la Guardia Civil.