Nuevo viaje de estado en la monarquía europea, esta vez con las casas danesas y suecas como protagonistas. Son Federico X y Mary los que visitan a los Bernardotte en su primera visita al extranjero desde que fueron coronados. Además, lo hacen a bordo del yate real Danneborg que los ha llevado a Estocolmo (aunque en realidad viajaron en avión para luego embarcar ya en aguas suecas). La pareja fue recibida a su llegada por los reyes Carlos Gustavo y Silvia y posteriormente disfrutaron de un almuerzo privado en palacio junto al resto de la Familia Real.
El viaje dura solo dos días, pero no falta el acontecimiento por excelencia, el que más gusta a los forofos reales: el banquete de gala. Esta cena, con vestidos largos y joyas emblemáticas, nunca defrauda y esta vez no iba a ser distinto. Siempre es el momento más esperado.
Poco antes de la hora prevista, Mary de Dinamarca bajaba del yate real luciendo una imagen majestuosa, con un vestido dorado con bordados en burdeos en la parte superior y una de sus tiaras más impresionantes.
La elegida para la ocasión es la de rubíes, que fue fabricada en 1804 y utilizada por la esposa del mariscal Juan Bautista Bernadotte, en un acto tan importante como la coronación de Napoleón. La Reina la he llevado en varias ocasiones, esta vez con los pendientes, el collar, la pulsera y el broche a juego.
Sin duda ha sido uno de los mejores looks de gala de la esposa de Federico X, que ha aderezado con el retrato de su marido prendido en el vestido como hizo también en su último retrato oficial. El pelo recogido en un elegante moño y maquillaje suave como guinda. Por su parte, Federico X lucía traje militar de gala.
Hay que destacar que aunque el diseño de la Reina de Dinamarca no era nuevo -lo estrenó en 2017 y lo ha llevado en 2022- lo ha modificado para la ocasión para que lo pareciera; no es una sorpresa, porque acostumbra a hacerlo. De este modo le da nuevas vidas a las piezas de su armario.
Mary no ha sido la única protagonista, Silvia de Suecia, su hija Victoria y su nuera, la princesa Sofía también han destacado por su elegancia. La Reina, con un elegante vestido verde de encaje y sus joyas más emblemáticas. Nos referimos a la imponente tiara de zafiros Leuchtenberg, con su collar y sus pendientes a juego, 'rivalizando' en espectacularidad con su invitada.
Tampoco se ha quedado atrás la heredera al trono, aunque ha rebajado un poco el tono. Victoria lucía un vestido blanco cuajado de lentejuelas del diseñador Christer Lindarw, con cuello barco. Sobre él, la orden del elefante y complementos en metalizado. Su tiara no tenía tanta altura, pero estaba conectada históricamente con la Familia Real danesa. Se trata de la tiara Connaught, realizada en diamantes.
En cuanto a la esposa del príncipe Carlos Felipe, ha vuelto a demostrar su estilo propio con un vestido empolvado que ya lució en los premios Nobel 2022 y que siempre es un sí. Con bordados florales, manga tres cuartos, cuello alzado y falda capa, el diseño de Ida Lanto le favorece especialmente. No hubo sorpresas con la tiara: volvió a llevar la de su boda, que es una de sus preferidas.