Cada aparición pública de Kate Middleton desde que comenzó su baja médica para tratar el cáncer que padece se convierte en un acontecimiento. Aunque no ha regresado a sus deberes oficiales, de vez en cuando aparece por sorpresa en redes sociales y entonces todos los detalles de su imagen son analizados con lupa. La última ocasión ha sido con motivo de los Juegos Olímpicos, para felicitar a los deportistas británicos. ¿Y qué fue lo que más llamó la atención? Un anillo que sustituía al de compromiso que suele lucir.
La Princesa de Gales había elegido para esa puesta en escena un atuendo casual, con una de esas camisetas de rayas marineras que tanto le gustan, en concreto una de Ralph Lauren, el pelo ligeramente más rubio y con unas incipientes canas a la vista, casi sin maquillaje y con una joya diferente que enseguida llamó la atención.
Acostumbrados a verla luciendo el anillo de zafiros que perteneció a Lady Di, sorprendió que la esposa del príncipe Guillermo lo hubiera cambiado por un diseño de oro adornado con gemas, que se conoce como banda de la eternidad. ¿Es nuevo o ya estaba en su joyero desde hace tiempo?
Al tratarse de un vídeo corto, no es posible apreciar bien la pieza, pero bien podría tratarse del anillo que su marido le regaló cuando empezaron a salir juntos durante su época universitaria en St. Andrews en Escocia como señal de amor eterno. Lo cierto es que hacía muchísimo tiempo que no lo mostraba en público, porque desde el compromiso lo sustituyó por la magnífica pieza que había pertenecido a su suegra y que no se ha quitado durante años.
Pero hay otra teoría: podría tratarse de un nuevo anillo, inspirado en aquel de juventud que tenía granates y perlas y era de inspiración victoriana, que el Príncipe de Gales le habría regalado por su 13 aniversario de boda el pasado 29 de abril.
Sea como fuere, parece tratarse de un precioso gesto hacia su marido, que está a su lado apoyándola incondicionalmente en la adversidad. La pareja se encuentra de vacaciones con sus tres hijos en su refugio de Anmer Hall, una casa de campo ubicada en Sandringham que recibieron como regalo nupcial por parte de Isabel II.
Por el momento, no se ha anunciado cuándo regresará Kate a sus deberes reales y tampoco se ha dado un nuevo parte médico, aunque tiene buen aspecto y en su último vídeo se mostraba muy sonriente.