Los Premios Francisco Cerecedo son siempre un momento especial en la agenda de los Reyes. Se trata de un galardón de periodismo al que ya acudían, cada edición, cuando eran todavía Príncipes de Asturias, y en el que la Letizia pone especial ilusión, ya que se cita con viejos conocidos de su antigua profesión.
La Asociación de Periodistas Europeos en España se reúne para galardonar a aquellas personas que se hayan distinguido en especial por su trabajo periodístico o de divulgación. La Reina siempre acude a la cita de manera impecable, eligiendo looks muy favorecedores, apostando por prendas clásicas con un toque moderno y original. Es una de sus noches favoritas del año y se esmera en su imagen.
La Reina, en los Premios Francisco Cerecedo.
Un buen ejemplo fue el outfit elegido en la edición anterior. Para la ocasión optó por un traje en color blanco compuesto por una blazer clásica y pantalones campana de Hugo Boss. Lo combinó con un top lencero con encaje, un bolso de mano rígido y rectangular de Magrit y salones destalonados de estilo kitten heel de la misma firma. Correcto y elegante.
Pero sin duda, el más comentado fue el que lució en 2017. Pocas veces hemos visto a Letizia con un look tan atrevido, con un espectacular vestido mini de volantes de Teresa Helbig, en blanco, con el cuello y los tirantes en negro. Una prenda que rápidamente se hizo viral y que tuvo tanto defensores como retractores. Aunque no sabemos si le afectó tanto comentario, lo cierto es que nunca más se lo ha vuelto a poner.
Para esta ocasión, ha vuelto a una imagen que hacía mucho tiempo que no veíamos, pero perfecta para una noche como esta. La Reina ha escogido un esmoquin negro, una prenda masculina y que tanta elegancia le proporciona al cuerpo de una mujer cuando lo viste.
No es nuevo en su armario. De hecho, lo estrenó hace casi cinco años, en la gala aniversario de Antena 3 y fue muy comentado porque era prácticamente igual que el de la estrella de esa cadena de televisión, Susanna Griso.
La Reina, en los Premios Francisco Cerecedo.
El diseño es básico y sencillo, ya que se trata de un traje de noche formado por una chaqueta entallada, con cuello y bolsillos exteriores en raso, y pantalón ancho. Firmado por Mango, se puede decir que es un clásico en la historia de la sastrería masculina.
Aunque siempre esperemos que luzca un zapato alto para darle el toque sexy al conjunto, esta vez ha prescindido de los taconazos y se ha calzado unos más bajos y cómodos, de Massimo Dutti. No podemos negarlo: echamos de menos los stilettos de Letizia, aunque entendemos perfectamente el motivo de su cambio.
Las joyas han seguido la línea del resto del atuendo, y además del anillo de Coreterno, ha lucido unos pendientes en oro amarillo que parecen un aro cerrado, pero que en realidad terminan por detrás en una gran abertura. Son de Singularu, la marca valenciana por la que apostó en varias ocasiones en los últimos días, en apoyo a las víctimas de la DANA.
Para cerrar el look de noche, ha elegido un bolso negro, a juego con zapatos y traje, de Carolina Herrera. Lo ha llevado muchas veces desde que lo vimos por primera vez en el verano de 2016. Está hecho en piel de becerro y es el modelo Astrud.
La Reina vuelve mañana 19 de noviembre a Valencia con Felipe VI para visitar las zonas afectadas por la Dana a las que no pudieron llegar el pasado 3 de noviembre debido a los incidentes que se produjeron. De nuevo, allí su look será lo de menos.