El confinamiento que trajo consigo el coronavirus el año pasado paró temporalmente la vida de la mayoría de españoles y puso nuestra vida patas arriba. También frenó temporalmente las esperanzas de muchas mujeres y parejas para tener hijos, ya que las clínicas de reproducción asistida, como el resto de negocios, se vieron obligadas a cerrar.
Esos meses, unidos a la crisis económica que ha acompañado a la sanitaria, podrían haber hecho que muchas pacientes desistiesen en los intentos por concebir o lo pospusiesen para un momento más idóneo, pero no ha sido así. Así lo ha confirmado Policlínica IVI, que incluso ha aumentado el número de pacientes durante la pandemia.
"Pensamos que se iba a parar bastante, pero cuando se pudo volver a abrir y se empezó a ver que de cara a los embarazados la Covid no parecía tener muchos riesgos para la embarazada, los pacientes empezaron a retomar el ritmo. Hemos notado que ha habido mucho trabajo", explica la doctora Victoria Bonet, directora médica de Policlínica IVI, a MagasIN.
Y es que cuando se trata de tratamientos de fertilidad, el tiempo es un factor clave para muchas mujeres, por lo que retrasarlo puede ser muy perjudicial. Por esa razón, en junio del año pasado la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) animó a todas las personas que estuviesen en proceso a retomar sus tratamientos, afirmando que son "seguros" incluso en un contexto de pandemia.
"Hay mujeres que se pueden permitir el esperar unos meses a ver cómo va, pero hay otras que van muchísimo más apuradas y seis meses o un año les va a condicionar todo su futuro reproductivo", asegura la doctora Bonet.
Esos meses de cierre generaron una gran incertidumbre entre profesionales y pacientes. "Estuvimos en contacto muy estrecho con las pacientes, siempre dando información de cómo iban las cosas, llamándolas con frecuencia. Era un poco como ‘no nos hemos olvidado de vosotras, sabemos la situación por la que estáis pasando y a la mínima que podamos abriremos con seguridad’. Siempre hubo un contacto telefónico".
Al reabrir la clínica, con todas las medidas de seguridad, se fueron retomando los tratamientos poco a poco, empezando por aquellos que se habían quedado en pausa a la mitad del proceso. A partir de ahí ha sido un no parar.
"Son mujeres muy concienciadas sobre las medidas de protección. Sabiendo eso pues decían: vamos a hacer todo lo posible por evitar un contagio y para poderlo hacer con la máxima seguridad. No solo por no cogerlo ellas, sino que para que no afectase a los bebés".
Igualmente, también se podía pensar que debido a la crisis económica disminuirían los pacientes pero, como afirma la doctora Bonet: "Hay muchas parejas que lo que antes invertían en un viaje lo han ahorrado y se han centrado en esto. El aspecto económico es muy importante, pero cuando hay una prioridad se buscan las maneras".
De esta forma, la directora médica de Policlínica IVI afirma que "ha habido un 30% más de contactos nacionales y 3.000 pacientes internacionales más a pesar de las restricciones". Además, en la Clínica IVI en general, "un 17% más de ciclos nacionales".
"Creo que ha habido progresión de trabajo en prácticamente todas las clínicas. Lo que pasa es que Policlínica IVI de Ibiza, al ser una clínica que abrió hace dos años y medio, pues no puedo decir que sea solo por la pandemia. Todo debe influir, pero al final hay otros factores: se va dando a conocer, tiene buenos resultados y el boca a boca funciona... En general las cifras han sido buenas".
Preservación de óvulos
Aunque no hay un servicio específico del cual haya aumentado la demanda, la doctora Bonet considera que "la preservación de óvulos es algo que va a ser el pan nuestro de cada día en el futuro".
"Las mujeres retrasamos más la maternidad y cada vez está más al alcance de la calle esta opción. Si te los congelas ya con 40 años la calidad no es la misma y si lo haces con 33 nunca es garantía de un embarazo, pero sí puedes decir que las opciones son más altas. Es algo que se va abriendo en la mentalidad de la gente más joven que dice: Oye, por qué voy yo a vivir con este estrés de si luego voy a ser muy mayor o qué va a pasar".