El término insuficiencia ovárica precoz (IOP) se utiliza para hacer referencia al hipogonadismo primario aislado en mujeres adultas y que supone el cese de la función ovárica antes de los 40 años. También se denominó "fallo ovárico precoz" y "menopausia precoz".
Supone el agotamiento temprano de la reserva ovárica (ovocitos) de la mujer y, por tanto, el compromiso de su fertilidad si ésta no se ha satisfecho. Al no haber ovulación, no se producirán las hormonas ováricas estradiol y progesterona y la menstruación acabará desapareciendo.
Hay una entidad denominada fallo ovárico precoz oculto en el que las alteraciones hormonales no se ven acompañadas de la falta de menstruación haciendo más difícil la sospecha del problema.
Su prevalencia es baja, se estima en el 1%.
¿Cuáles son las causas?
En la mayoría de los casos (el 90%) es desconocida (idiopática), pero se conocen factores que podrían estar relacionados como:
- Radioterapia pélvica o quimioterapia.
- Cirugía practicada sobre el ovario.
- Alteraciones genéticas (SDR. Turner, Cromosoma X frágil..., etc.).
- Tóxicos (tabaco, pesticidas, disolventes…).
- Enfermedades autoinmunes endocrinológicas (diabetes, hipotiroidismo, insuficiencia adrenal, hipoparatiroidismo…etc.) y no endocrinológicas (Crohn, vitíligo, lupus, artritis reumatoide..., etc.) están presentes en un 15-30% de los casos de IOP.
- Además, tener un antecedente familiar de primer grado con IOP incrementa el riesgo de padecer el problema.
Los síntomas
Son los propios de la pérdida de los estrógenos:
- Amenorrea o irregularidad menstrual con ciclos acortados si es un fallo ovárico oculto.
- Sofocos.
- Insomnio.
- Pérdida de libido.
- Sequedad vaginal.
¿Cómo se diagnostica?
A través de la historia clínica y antecedentes familiares, exploración general y ginecológica y pruebas analíticas.
Se diagnostica si existe la falta de menstruación (amenorrea) en mujeres menores de 40 años asociada a:
- Elevación de hormona folículo estimulante (FSH), generalmente > 40 mUI/ml.
- Disminución de niveles de estrógenos (estradiol).
La analítica deberá ser repetida en dos ocasiones separadas por al menos 1 mes.
Si no hay patología asociada se puede solicitar cariotipo, hormonas tiroideas con anticuerpos antitiroideos, cortisol, anticuerpos antiadrenales, calcio y mutación X frágil
Las consecuencias
- Esterilidad.
Aunque, si no existen alteraciones genéticas de base, en un 5-10% se consigue gestación espontánea porque la alteración no es permanente.
Podemos medir la reserva ovárica a través de la hormona antimulleriana que nos da una idea de la cantidad de ovocitos que quedan y del tiempo de fertilidad que queda, pero no nos informa de la calidad de dichos ovocitos.
Las mujeres con deseo de ser madre en el momento del diagnóstico deberán acudir a consultas de Ginecología especialistas en fertilidad para consejo y valoración de las opciones de tratamiento en función de cada caso (con óvulos propios o mediante ovodonación que tiene claras tasas de éxito).
- Enfermedad cardiovascular, por la pérdida del efecto protector de los estrógenos.
- Osteoporosis.
- Depresión.
- Enfermedades endocrinas autoinmunes. Debemos realizar screening de hipotiroidismo y de insuficiencia adrenal que a veces aparecen años después de la IOP.
*La doctora María Luisa de Mingo es especialista en endocrinología y nutrición del Hospital La Luz.