Las redes sociales e Internet constantemente se llenan de consejos, claves o trucos para perder peso a través de todo tipo de dietas o incluso a través de trucos de TikTok. Consejos y modas entre las que en los últimos años ha ganado protagonismo la denominada faseolamina o extracto de judía blanca. Sin embargo, ¿cómo podemos ser capaces de diferenciar las formas más saludables o no para bajar peso?
La realidad es que lejos de perder peso o bajar kilos, lo importante es que tanto la dieta como el estilo de vida que lleves sean siempre saludables y nunca basados únicamente en las restricciones. Conseguir un peso equilibrado y saludable es importante, pero lo mejor es siempre hacerlo de la mano de un experto en nutrición que pueda adaptarse a tu caso particular. En este caso hoy hemos decidido hablarte de la famosa faseolamina y de sus efectos. ¿Es realmente eficaz está sustancia? Te lo contamos.
¿Por qué se utiliza para adelgazar?
La faseolamina es un compuesto proveniente de los frijoles blancos, una proteína bioactiva especialmente popular para bajar de peso debido a que inhibe la enzima alfa-amilasa. En otras palabras, la faseolamina se encarga de dificultar la digestión y de la absorción de los carbohidratos complejos. Carbohidratos muy presentes en alimentos como los cereales o productos derivados como el pan, la pasta, las patatas o las legumbres.
[¿Quieres adelgazar? 7 técnicas para sentirte llena comiendo menos]
Esta sustancia se encuentra presente en las vainas de las judías blancas, también denominadas frijoles blancos. En cuanto a su obtención, esta se produce con el extracto de este tipo de judías, después de un complejo proceso dividido en fase de molienda, drenaje, filtrado, concentración al vacío, pasteurizado y secado.
¿Cómo actúa en el cuerpo?
Como te hemos adelantado, la faseolamina inhibe la enzima alfa-amilasa producida por el páncreas, la cual es liberada al intestino delgado después de la digestión de la comida. Esta enzima lo que hace es transformar este almidón en glucosa y esta atraviesa la barrera intestinal llegando al torrente sanguíneo. De esta forma, la faseolamina bloquea dicho proceso haciendo que los carbohidratos ingeridos no sean absorbidos e impide que realicen su aporte calórico.
Cabe señalar que los estudios realizados al respecto varían siempre en función de las características, el estilo de vida y los hábitos alimenticios de cada persona. Aún así, el consumo de faseolamina normalmente está vinculado a esa reducción en la absorción de las calorías del almidón presentes en aquellos alimentos ricos en hidratos de carbono.
¿Es realmente eficaz para perder peso?
Aunque son varios los estudios que demuestran que este producto natural podría tener efectos en la pérdida de peso, la realidad es que no está demostrado al cien por cien que esto suceda de manera saludable y equilibrada para el organismo. Y es que, aunque en el mercado existen múltiples versiones de este extracto a través de cápsulas, pastillas o bebidas, es importante señalar que el consumo excesivo de esta sustancia podría bloquear gran parte de los carbohidratos complejos y dejar al organismo expuesto sin ellos.
Esta es una de las principales razones por las que antes de ponerla a prueba deberías consultar a un experto en nutrición que pueda recomendarte o no, el uso pautado de faseolamina, junto con unos hábitos alimenticios saludables y ejercicio.
Además de una dieta equilibrada, lo más aconsejable para que la faseolamina haga el efecto esperado, es no abusar de alimentos ricos en carbohidratos complejos. De esta forma, su colaboración en nuestra dieta equilibrada sí podrá tener sentido y sí podrá ayudarnos a controlar nuestro peso.
[Los 5 trucos de la cultura japonesa para adelgazar]