Los beneficios de tomar manzanilla por la noche que hacen que te despiertes con la tripa plana

En la mayoría de ocasiones, tomamos manzanilla para aliviar trastornos del estómago, pero lo cierto es que esta planta medicinal puede resultar de gran ayuda gracias a sus propiedades terapéuticas y otros interesantes beneficios que nos ayudarán a mantenernos en forma por dentro y por fuera. 

Empezó creciendo en los Balcanes y poco a poco se fue popularizando en Europa por sus interesantes características con fines medicinales. Lo único que se aprovecha de la manzanilla es su flor. 

Una popular infusión con propiedades antiinflamatorias, antiespasmódicas, sedantes y ansiolíticas que ayudan a aliviar la ansiedad e incluso el malestar provocado por el síndrome premenstrual, según estudios realizados en 2019 gracias a una amplia variedad de principios activos como el bisabolol, uno de sus componentes principales, tiene propiedades antiinflamatorias y relaja el revestimiento del músculo liso del tracto digestivo..

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Propiedades y beneficios

La infusión de manzanilla funciona como una gran aliada contra las infecciones, combatiendo las bacterias y estimulando el sistema inmunológico. Además, si inhalas vapor del té de manzanilla puedes aliviar la congestión nasal y el dolor de garganta en momentos de resfriado. 

Su uso más común es como relajante digestivo. La manzanilla es un recurso de confianza en momentos de acidez, náuseas, vómitos y otros trastornos gastrointestinales.

Con un aporte de calorías prácticamente inexistente, esta tradicional infusión suele tomarse después de cenar y, no solo nos mantiene hidratados durante las horas siguientes, sino que además nos ayuda a combatir el estrés y conciliar el sueño.

Más allá de favorecer el descanso, la infusión de manzanilla también se utiliza por la noche para facilitar la pérdida de peso. Pero ¿cómo lo hace? Bien, igual que otros superalimentos como la canela, esta controla los niveles de azúcar en sangre y elimina las toxinas del organismo. Y es diurética, lo que nos viene genial a la hora de prevenir la retención de líquidos.

Infusión de manzanilla. iStock

La manzanilla destaca por sus propiedades analgésicas y antiespasmódicas, relaja el útero y disminuye la producción de prostaglandinas. Estas sustancias son sustancias derivadas de ácidos grasos que pueden causar inflamación y dolor. Por eso, muchas mujeres la consumen para aliviar los calambres y molestias de la menstruación. 

Lo cierto es que es uno de esos remedios que nos cuida por dentro, pero también por fuera. La camomila también se emplea como tópico, desde hace siglos, para curar heridas y acelerar la curación, además de tratar otras afecciones de la piel como el eccema o la psoriasis.

En esta misma línea, puede ser una gran aliada en nuestra batalla contra granitos y rojeces. Gracias a sus propiedades antiinflamatorias y antisépticas puede ayudar a desvanecer manchas, combatir brotes y facilitar la regeneración de células.

¿Significa esto que también retrasa el envejecimiento? ¡Pues sí! La manzanilla es una fuente muy rica en antioxidantes y protege nuestra piel de la acción de los radicales libres. 

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Cómo preparar una infusión de manzanilla

Ingredientes. Para preparar una agradable infusión de manzanilla, lo único que necesitarás es: 4 gramos de flores de manzanilla, 200 mililitros de agua y un poquito de azúcar.

Puedes comprar la manzanilla en supermercados y herbolarios, o también puedes utilizar la planta fresca (que es mucho más recomendable) y aprovechar parte del tallo y de sus hojas a la hora de preparar la infusión. 

Modo de preparación. Vierte el agua en un cazo y llévala a ebullición junto con la manzanilla durante cinco minutos aproximadamente. El siguiente paso será retirarla del fuego y dejar que repose por diez minutos. Después, cuela el líquido para que no queden restos en la infusión. Aunque la manzanilla tiene un sabor dulce de forma natural, también puedes darle tu toque personal endulzándola con miel, azúcar o una hojita de estevia natural. 

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