Comenzar un proceso de adelgazamiento es complicado. Por mucho que cada vez resulte más simple encontrar todos esos alimentos saludables que conserven el sabor, el ejercicio ya no consista en rutinas estrictas y la nutrición haya ido un paso más allá y sea mucho más flexible y económica para todos los públicos, todavía hay mucha desinformación que nos impide perder esos kilos que tenemos en mente.
En la actualidad, ese gran interés por llevar una vida saludable y conseguir el cuerpo de nuestros sueños está acompañado de una serie de recomendaciones basadas en mitos y creencias que constituyen uno de los mayores problemas de la nutrición en la sociedad de hoy en día. Mientras que muchas de las dietas milagro lo único que producen son efecto rebote, alimentos que llevamos años consumiendo en exceso pueden terminar siendo uno de los motivos por los que no adelgazamos.
Dentro de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud para llevar a cabo una vida sana se recomienda la actividad física, el buen descanso, hidratación y una alimentación que incluya verduras y frutas. Estas últimas son fundamentales y necesarias para el funcionamiento correcto del cuerpo humano, por lo que es habitual pensar que todas ellas son saludables, ya que provienen de las plantas y cuentan con una gran variedad de propiedades nutritivas. Sin embargo, dentro del grupo existen algunas con más o menos características, las cuales las vuelven más o menos saludables si las tomamos en exceso.
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Todos estamos de acuerdo en que las frutas son esenciales. No solo la gran mayoría son beneficiosas, sino que aportan un sabor y texturas únicas que no podemos conseguir con otros alimentos. Además, dependiendo de la temporada pueden incluso otorgarnos ese frescor que necesitamos o esa energía para pasar el día. Lo cierto es que a pesar de todas sus ventajas, hay que tener presente que las frutas también aportan azúcares, y algunas son alimentos con un alto contenido en grasas.
Esto no indica que sean malas para la salud o que tengamos que prohibirlas en nuestro día a día, sino que debemos tomarla con más moderación o alternar su consumo con otras muchas otras que ofrezcan más beneficios, sobre todo, si lo que queremos es perder peso.
La fruta que tienes que evitar si quieres adelgazar
Una de las frutas que más hemos visto en los últimos meses es el aguacate. Este alimento verde se ha colado en todas las casas de España, colocándose como uno de los mejores complementos del desayuno y desbancando a muchos otros como el bacon, la mantequilla, los huevos o la mermelada. A pesar de su buena fama y sus beneficios, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha advertido recientemente de los riesgos asociados con su consumo excesivo.
En los últimos meses, hemos visto como decenas de personas han mantenido que el aguacate es el aliado perfecto de cara a la pérdida de peso, ya que contiene fibra y tiene un efecto saciante. Sin embargo, según el informe mencionado, no por ello podemos afirmar que tenga propiedades adelgazantes, sino que es una de las frutas más calóricas y con mayor contenido en grasa, por lo que las personas con sobrepeso deberían limitar su consumo.
El aguacate debe tomarse con moderación.
Su versatilidad lo ha convertido en un alimento indispensable, sin embargo, hemos ignorado los peligros ocultos que pueden surgir al incorporar demasiado aguacate en nuestra dieta diaria. Destaca por su alto contenido en grasas monoinsaturadas, y a pesar de que sean grasas "saludables", un exceso de estas puede conducir al aumento de peso y problemas relacionados con la salud cardiovascular.
Añadido a ello, el aguacate es una fuente significativa de ácido oleico, el cual puede ser beneficioso en cantidades adecuadas, pero si abusamos de ello puede provocar inflamación en el cuerpo, aumentando el riesgo de enfermedades crónicas como la artritis o la diabetes tipo 2.
Si queremos añadir esta fruta a nuestra dieta o rutina, lo ideal sería comer solo medio aguacate al día o lo que es lo mismo, comer dos o tres aguacates a la semana, ya que el exceso de su consumo puede ser perjudicial. Además, existen tres grupos que deben moderar de más esta ingesta, según los expertos.
Las personas que siguen una dieta hipocalórica, que implica una restricción calórica diaria o la reducción de la ingesta de alimentos, deben moderar su consumo de aguacate. Además, el exceso de potasio que contiene esta fruta puede ser perjudicial para las personas con problemas renales, por lo que se les aconseja evitarlo y, por último, aquellos alérgicos al látex deben tener precaución, ya que puede producir reacciones alérgicas.