En España, parece que las mujeres se hallan constantemente en la búsqueda de un superalimento, una supercrema o un superejercicio para evitar los signos de la edad. Sin embargo, pocos son los que saben que una buena alimentación es la clave de todo secreto para alcanzar la eterna juventud.
En especial a partir de los 50 y, es que, resulta que con el paso de los años nuestro cuerpo va experimentando cambios y es, precisamente, a partir de esta edad que debemos tener especial atención a los hábitos alimenticios.
Cómo cambia el cuerpo a partir de los 50
Cuando cumplimos cierta edad, el cuerpo comienza a experimentar algunos cambios en su interior que pueden afectar en gran medida a la forma en la que procesamos los alimentos y absorbemos los nutrientes.
[Los alimentos con hierro más recomendados para las mujeres (más allá de las lentejas)]
La disminución en la producción de ciertas enzimas digestivas y las hormonas, así como cambios en el metabolismo o un ritmo de vida más sedentario, influye especialmente en la forma en la que nuestro cuerpo responde a los alimentos que ingerimos.
Pero no solo eso y, es que, la masa muscular tiende a disminuir con la edad, y lo que antes era fácil de quemar ahora puede volverse casi una misión imposible. La forma de eliminamos calorías en nuestro cuerpo cambia exponencialmente y, es por ello, que una correcta alimentación empieza a cobrar un papel fundamental.
El fruto seco que tiene gran poder rejuvenecedor
En ese sentido, hay ciertos alimentos o componentes nutricionales que, a partir de los 50, emergen como auténticos salvavidas. Cargados de nutrientes esenciales, vitaminas y antioxidantes, algunas comidas son realmente el secreto para combatir los efectos del envejecimiento.
Entre todos ellos, los frutos secos surgen como una excelente fuente de grasas saludables, proteínas, fibra, vitaminas y minerales. En definitiva, lo tienen todo. Consumirlos regularmente puede ayudar a prevenir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 e, incluso, algunos tipos de cáncer.
Pero no solo eso y, es que, su perfil nutricional los convierte en el mejor aliado a la hora de mantenernos jóvenes gracias a su implicación en la salud del cerebro, la piel, los huesos y el sistema inmunológico.
Aunque, si tenemos que hablar de un fruto seco en concreto que destaque por su gran poder rejuvenecedor, la nuez es uno de nuestros favoritos. Son ricas en ácidos grasos como el omega 3, tiene antioxidantes y fitosteroles, todos ellos relacionados con la disminución de la inflamación, el bienestar del corazón y la mejora de la función cognitiva.
[Ocho alimentos para ganar masa muscular en las mujeres]
Y es que, también contienen melatonina, conocida como la hormona encargada de regular el ciclo del sueño y capaz de luchar contra el estrés oxidativo y el envejecimiento prematuro. Sin duda, hablamos de una auténtica joya del mundo de la alimentación.
Además, incorporar los frutos secos a tu rutina diaria es de lo más sencillo. Puedes incluirlos de forma natural o preparar esta receta tan rica y rápida que nos propone el cocinero de Tiktok bajo el perfil de @poesiadefogon.
Otro fruto seco que tampoco se queda corto en cuanto a propiedades contra los signos de la edad y es la almendra. Resulta que son una excelente fuente de vitamina E, un antioxidante clave a la hora de proteger a las células del daño causado por los radicales libres.
También son ricas en calcio, magnesio y potasio, tres nutrientes esenciales para la salud ósea y muscular, aspectos a tener en cuenta especialmente a partir de los 50.
En las mujeres con menopausia también puede ayudar a prevenir la osteoporosis, una enfermedad que afecta a aproximadamente 2 millones de personas de las cuales el 25% de ellas son postmenopáusicas.
Otros alimentos buenos a partir de los 50
Sin embargo, aunque nos encantan los frutos secos, también existen otros alimentos con gran poder rejuvenecedor que nos pueden ayudar a mantener la salud en línea a partir de cierta edad.
-
Verduras de hoja verde. La espinaca, la col rizada y la acelga, son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes, pudiendo ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas y mejorar la salud cardiovascular. Además, son bajas en calorías y ricas en fibra, ideales para mantener un peso saludable.
-
Bayas. Frutas como las fresas, los arándanos y las moras pueden convertirse en tu mejor aliado. Son una excelente fuente de antioxidantes, especialmente en flavonoides y antocianinas, lo que está relacionado con la prevención del estrés oxidativo y la inflamación.
-
Pescados. Especialmente las variedades grasas como el salmón, el bacalao, el atún o la trucha, pueden ayudarte a mejorar la salud del corazón, el cerebro y la piel. Gracias a sus compuestos ricos en omega 3, proteínas de alta calidad y nutrientes como el yodo y el selenio, son el alimento perfecto para mejorar la función cognitiva.
-
Legumbres. Los garbanzos, las lentejas y los frijoles, son una fuente maravillosa de proteína vegetal, fibra, vitaminas y minerales. Consumirlas de forma habitual ayuda a prevenir el riesgo de diabetes tipo 2, la obesidad y las enfermedades cardiovasculares.
Si bien es importante tomar en cuenta la alimentación a cualquier edad, es a partir de los 50 cuando debemos ser más conscientes de qué nutrientes nos pide nuestro cuerpo y dárselos en la medida de lo necesario.