El café es una bebida ampliamente consumida en todo el mundo por su capacidad para revitalizar y energizar. Más allá de su delicioso sabor y aroma, el café es conocido por sus múltiples beneficios para la salud, muchos de los cuales están respaldados por investigaciones científicas y grandes expertos, como la Universidad de Harvard.
Debido a todo ello, el café lleva años consolidando su puesto como la segunda bebida más consumida en el planeta, por detrás del agua y con una gran comunidad que asegura que no podría vivir sin una taza —mínimo— al día. Y mucho menos ahora, cuando todas sus ventajas han salido a la luz.
Sin embargo, hay todavía quienes tienen sus dudas, especialmente sobre la cantidad que podemos tomar o si es verdad que sube la tensión como dicen. Por ello, expertos como Boticaria García, indagan acerca del tema y confiesan a todos sus seguidores qué es lo que realmente pasa en nuestro organismo.
El aviso de Boticaria García sobre el café
El café es, desde hace años, una de las bebidas más consumidas a nivel mundial, por lo que ha estado sujeto a diferentes estigmas con el paso de los años. Mientras que antes su ingesta era claramente dudosa, y había quienes aseguraban que ese aporte energético tan rápido no podía ser beneficioso para la salud, los expertos han tratado de demostrar lo contrario.
Desde hace años, el perfil nutricional del café ha sido destacado por grandes profesionales. Como indican desde la Universidad de Harvard, se trata de una fuente rica en cafeína, vitamina B2 (riboflavina) y magnesio que puede disminuir patologías cardiacas, depresión, enfermedades neurodegenerativas y cálculos biliares. Además de tener propiedades anticancerígenas.
Sin embargo, a pesar de los estudios y los expertos, hay quienes todavía se preguntan si el café sube la tensión y, por tanto, si es una bebida prohibida para quienes la presión de la sangre en el organismo demasiado alta. Y aunque la respuesta sea dudosa, expertos como Boticaria García explican que "depende".
Tal y como indican los expertos de Mayo Clinic, la cafeína provoca un aumento breve, pero significativo de la presión arterial, incluso si no tenemos presión arterial alta. La causa de este aumento repentino no es del todo clara; sin embargo, todo ello varía de la persona y aunque anteriormente muchos médicos habían desaconsejado el consumo de café a personas con hipertensión, ahora existen multitud de estudios que hablan de sus beneficios.
La farmacéutica y nutricionista, en este caso, confiesa que el café, en corto plazo, "aumenta la presión arterial", aunque es un efecto que "ocurre especialmente en aquellas personas que son metabolizadores lentos, es decir, que les cuesta más depurar el café".
La manera en la que nuestro cuerpo procesa la cafeína puede revelar el tipo de metabolismo que tenemos: si al tomar una taza de café te sientes enérgico durante horas sin efectos secundarios, es posible que seas un metabolizador rápido. En cambio, si una taza te hace sentir nervioso o altera tu sueño, podrías ser un metabolizador lento.
Los metabolizadores lentos de la cafeína son más sensibles a sus efectos estimulantes, por lo que es posible que sufran diferentes síntomas y pequeñas cantidades de cafeína provoquen efectos significativos. Debido a la lenta tasa de metabolización, la cafeína permanece más tiempo en el organismo, por lo que se prolongan sus efectos.
Aunque en cierta forma esto parezcan efectos positivos, ya que nos mantenemos más enérgicos con menos cantidad, también pueden suponer nerviosismo o, incluso, dificultad para dormir u otros efectos secundarios como palpitaciones, ansiedad y problemas gastrointestinales.
"Para este tipo de personas —metabolizadores lentos— sí puede subir la tensión", explica Boticaria García. "Si eres un metabolizador rápido y tu hígado y riñones van como un cohete, el aumento de la tensión no debe ser un problema porque cuando el café se metaboliza la presión arterial vuelve a ser normal", finaliza.
Y aunque este metabolismo venga "en los genes", como explica la farmacéutica, existen una serie de consejos para aquellos que son lentos y, por tanto, evitar que les suba la tensión. Principalmente, limitar el consumo, ya que ellos experimentarán más los efectos al mantenerse más tiempo la cafeína en el organismo.
Otra opción consiste en optar por alternativas sin cafeína o sin efectos secundarios, pero que energicen el cuerpo, como es el caso del té matcha u otro tipo de productos. En el caso de que los efectos como el nerviosismo o la ansiedad sean recurrentes, se debe acudir a un médico, ya que podría estar asociado con la hipertensión arterial.
Las tazas de café que puedes tomar al día
Por las mañanas, por las tardes, o incluso, por las noches, el café es uno de los imprescindibles en muchos hogares españoles. Los consumidores de nuestro país toman un promedio de 3,6 cafés diarios entre semana, según apuntan los datos del informe sobre los 'Hábitos de Consumo de Café en España'.
Recientemente, la Fundación Española del Corazón ha recomendado el consumo del café porque "se asocia a una mayor longevidad y una mayor supervivencia de la población general". En concreto, el estudio ha detallado que es saludable tomar hasta cuatro o cinco tazas de café al día. Una afirmación que también alabó el 'European Journal of Preventive Cardiology' en septiembre de 2022.
Las cantidades que se consumen de café no están asociadas a efectos negativos en el cuatro. Así lo ha expresado la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos, que ha detallado cuál es la cantidad diaria de café que se recomienda tomar al día.
Según la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria), es seguro tomar hasta 400 mg de cafeína al día. Un expreso pequeño tiene aproximadamente 80 mg de cafeína, mientras que una taza de café de filtro, tiene unos 90 mg de café. Es decir, estamos hablando de que podríamos tomar unas 5 tazas de café al día, siempre y cuando no nos las tomemos de golpe, y repartamos las dosis a lo largo del día.