Si has perdido las ganas de sexo y la libido ha desaparecido, te contamos el porqué ha sucedido y cuáles son los remedios que puedes utilizar para recuperarla.

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Los cambios hormonales que se dan en la etapa de perimenopausia y menopausia pueden afectar varios aspectos de la salud, incluida la sexualidad. Uno de los cambios más comunes y que afecta a un 43% de las mujeres es la disminución de la libido. 

Estrógenos y progesterona

Durante la menopausia, los niveles de estrógenos y progesterona disminuyen significativamente. Estas hormonas desempeñan un papel crucial en la regulación del deseo sexual. El estrógeno, en particular, ayuda a mantener la salud vaginal y la lubricación, mientras que la progesterona contribuye al equilibrio hormonal general, afectando también al deseo sexual

Testosterona

La testosterona también es producida en pequeñas cantidades por los ovarios y las glándulas suprarrenales en las mujeres y al igual que los estrógenos y la progesterona, disminuye en las etapas de perimenopausia y menopausia.

La testosterona es importante para mantener el deseo sexual en las mujeres, ya que contribuye a la sensibilidad del clítoris y el resto de los tejidos genitales. Además, la testosterona está relacionada con la energía, el estado de ánimo y la motivación, factores que pueden influir en la libido.Esta hormona es importante para el deseo sexual. Durante la menopausia, la producción de testosterona también disminuye, lo que puede contribuir a la reducción de la libido.

Factores físicos

Existen también factores físicos que pueden influir y disminuir considerablemente la falta de deseo sexual, como pueden ser:

  • Sequedad vaginal 

    La reducción de los niveles de estrógenos provoca una disminución en la producción de lubricación vaginal que puede derivar en sequedad vaginal, provocando incomodidad o incluso causar dolor durante las relaciones sexuales. La sequedad vaginal también puede aumentar el riesgo de infecciones vaginales y urinarias, muy comunes en estas etapas.

  • Disminución elasticidad

    Los tejidos vaginales pueden volverse más delgados y menos elásticos, un fenómeno conocido como síndrome genitourinario de la menopausia" (SGM)l. Esto no solo puede hacer que las relaciones sexuales sean dolorosas, sino que también puede llevar a una disminución del deseo sexual debido a la anticipación del dolor o molestias.

  • Fatiga y problemas de sueño

    Los trastornos del sueño son comunes durante la menopausia y pueden llevar a tener una sensación constante de fatiga. Sentirse constantemente cansada puede reducir significativamente el interés en el sexo y en las relaciones sexuales.

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Factores emocionales 

Además de los cambios físicos, la menopausia puede tener un impacto emocional y psicológico significativo. Los cambios hormonales pueden provocar fluctuaciones en el estado de ánimo, ansiedad y depresión, todos los cuales pueden afectar negativamente la salud sexual. Destacamos los siguientes:

  • Cambios en la autoestima

    Los cambios físicos asociados con la menopausia, como el aumento de peso y la pérdida de elasticidad en la piel, pueden afectar la autoestima de las mujeres que afrontan estas etapas, repercutiendo a la hora de sentirse menos atractivas y menos deseadas, disminuyendo así la líbido. 

  • Estrés y ansiedad

    El estrés y la ansiedad también es otro factor que puede afectar negativamente a la libido. Además, los cambios hormonales pueden provocar fluctuaciones en el estado de ánimo, contribuyendo a la depresión y la ansiedad y reduciendo así el deseo sexual.

Aumentar la líbido

Es conveniente recordar que el deseo sexual comienza en el cerebro, donde se procesan los estímulos sexuales y se generan las respuestas emocionales y físicas y todos los factores físicos y psicológicos mencionados anteriormente pueden influir significativamente en la libido. Pero si nos ocurre esta falta de deseo sexual ¿ qué es lo que podemos hacer para poner remedio?

  • Terapias psicológicas

    - Terapia sexual: un terapeuta sexual puede proporcionar estrategias y técnicas para mejorar la intimidad y la satisfacción sexual y puede darnos consejos para sentirnos cómodas y ganar nuevamente autoestima.

    - Terapia cognitivo-conductual (TCC): puede ayudar a cambiar patrones de pensamiento negativos y mejorar la respuesta sexual al reducir la ansiedad y aumentar la autoestima.

  • Técnicas de relajación

    - Meditación y mindfulness: estas prácticas pueden reducir el estrés y la ansiedad, mejorando la capacidad de disfrutar del sexo.

    - Yoga: el yoga no solo mejora la flexibilidad y la fuerza, sino que también puede reducir el estrés y aumentar la conexión mente-cuerpo.

  • Muy importante establecer comunicación con la pareja

    La comunicación abierta y honesta con la pareja sobre los cambios en la libido y las preocupaciones relacionadas con la menopausia es crucial. Explorar nuevas formas de intimidad y conexión puede fortalecer la relación y aumentar el deseo sexual. La menopausia puede ser una oportunidad para explorar nuevas formas de intimidad con la pareja. Esto puede incluir actividades que no necesariamente impliquen el coito, como masajes sensuales, caricias y otras formas de contacto íntimo.

  • Educación y conocimiento

    Educarse sobre la menopausia y sus efectos en la salud sexual puede empoderar a las mujeres para tomar decisiones informadas sobre su salud y bienestar. Leer libros, asistir a seminarios y buscar información confiable puede ser muy beneficioso.

  • Mantener una actitud positiva

    Mantener una actitud positiva y abierta hacia los cambios que trae la menopausia puede hacer una gran diferencia. En lugar de ver la menopausia como el final de la sexualidad, verla como una nueva etapa de la vida con sus propias oportunidades y desafíos puede ser transformador.

Tratamientos médicos

  • Terapia hormonal: la terapia hormonal puede ayudar a aliviar los síntomas de la menopausia, incluida la disminución de la libido. Esto puede implicar el uso de estrógenos, progesterona y, en algunos casos, testosterona. Es crucial discutir los riesgos y beneficios de la terapia hormonal con un profesional de la salud. Dentro de esta terapia hormonal existiría la terapia local con estrógenos, para aquellas que no desean o no pueden usar terapia hormonal sistémica, las terapias locales con estrógenos, como cremas, tabletas o anillos vaginales, pueden ser efectivas para tratar la sequedad vaginal y mejorar la salud sexual. También existiría el tratamiento hormonal, que consiste en la suplementación con estrógenos y progesterona, vía transdérmica en el caso de los estrógenos y oral en el caso de la progesterona

Lubricantes y humectantes vaginales

El uso de lubricantes a base de agua o silicona puede ayudar a aliviar la sequedad vaginal y hacer que las relaciones sexuales sean más cómodas. 

Los humectantes vaginales, en cambio, se deben usar regularmente para mantener la humedad vaginal. Es importante diferenciar el uso de unos y otros. Los lubricantes facilitan las relaciones y, sin embargo, los humectantes ayudarían con la hidratación vaginal recurrente. 

Algunas mujeres encuentran alivio en el uso de suplementos a base de plantas. Istock

Fitoterapia

Algunas mujeres encuentran alivio en el uso de suplementos a base de plantas, como el cohosh negro y el trébol rojo, aunque la evidencia científica sobre su eficacia varía. El que sean productos naturales no implica que tengan un efecto inocuo en nuestra salud. Es importante hablar con un médico o con un profesional antes de comenzar cualquier suplementación.

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Estilo de vida

Al igual que con el resto de síntomas de las etapas de perimenopausia y menopausia, el cambio en el estilo de vida es algo que deben plantearse las mujeres que se acercan a los 40/45 años:

  • Realizar ejercicio regular: el ejercicio regular no solo mejora la salud física, sino que también puede aumentar los niveles de energía, mejorar el estado de ánimo y reducir el estrés, todos factores que pueden contribuir a una libido más alta.

  • Dieta saludable: una dieta balanceada rica en frutas, verduras, proteínas magras y granos enteros puede apoyar el bienestar general. Además, algunos alimentos, como los ricos en ácidos grasos omega-3, pueden ayudar a mantener un equilibrio hormonal saludable.

  • Reducción del estrés: el manejo del estrés a través de técnicas de relajación como el yoga, la meditación y la respiración profunda puede mejorar la salud emocional y, en consecuencia, la libido.

  • Practicar el autocuidado: el autocuidado es crucial durante la menopausia. Esto puede incluir actividades que promuevan el bienestar físico y emocional, como tomar baños relajantes, meditar, leer o dedicarnos un tiempo para nosotras mismas, también puede ayudar