La profesionalidad de Susanna Griso es una obviedad, al igual que su espléndida silueta, fruto de una rutina de entrenamiento que la permite cuidar su salud y lucir fantástica. La actividad física y una dieta equilibrada es clave para conseguirlo, una vez hemos alcanzado la década de los 50.
Aunque la presentadora siga una disciplina que la mantenga en forma, debes adaptar tu entrenamiento a tus necesidades para obtener los mejores resultados. Sin embargo, los brazos son una de las partes del cuerpo que más experimentan los signos del envejecimiento.
Para unos brazos tonificados, uno de los ejercicios más completos que existen son las flexiones de diamante. Un entrenamiento muy efectivo con el que se trabajan las tres cabezas principales del músculo: larga, lateral y medial. Al ejercitar los tríceps, todas estas experimentan una contracción.
Cuando cumplimos cierta edad, los ejercicios de fuerza son fundamentales para mantener la elasticidad y masa muscular. Incorporarlos a nuestra rutina obtiene múltiples beneficios en nuestra salud, especialmente en la de mujeres postmenopáusicas.
Incorporando este tipo de flexiones a tu rutina de entrenamiento conseguirás tener unos brazos fuertes y definidos, perfectos para lucirlos con tus prendas favoritas, además de para mejorar tu calidad de vida.
Cómo tonificar tus brazos
Los brazos son una de las partes de nuestro cuerpo que, por lo general, siempre incluimos en nuestros entrenamientos y que, sin embargo, no siempre tenemos los resultados deseados.
Las flexiones de diamante, también conocidas como diamond push ups, es la mejor elección, precisamente por este aspecto. Además de estar trabajando todos los músculos de los brazos, fortalecerás también los correspondientes al tren superior del cuerpo.
Para ponerla en práctica, sigue las siguientes pautas. En un principio puede que te cueste coger ritmo, pero en menos tiempo de lo que crees, las flexiones diamante se habrán convertido en tu mejor aliado.
- Túmbate boca abajo.
- Coloca las puntas de los pies en el suelo, apoyadas y muy cercas la una de la otra.
- Forma con las dos manos un triángulo, uniendo los pulgares y las puntas de los dedos índices, y colócalas bajo el pecho.
- Levanta tu cuerpo por completo, haciendo que la cadera y la espalda estén alineadas junto con los hombros y la cabeza. Es decir, intentando permanecer en línea recta.
- Manteniendo esta posición de tabla con los brazos completamente extendidos, vuelve a flexionarlos para descender hasta que el pecho llegue a rozar tus manos.
Es importante que eleves y desciendas al mismo tiempo las caderas y los hombros, del mismo modo que los codos estén lo más cerca posible del torso para así conseguir unos mejores resultados y que el ejercicio no resulte perjudicial para tu bienestar.
Repite este ejercicio tantas veces como consideres oportuno hasta que vayas cogiendo soltura. Lo más recomendable es realizar, al menos, tres series de 15 repeticiones para lograr tus objetivos lo antes posible.
Beneficios de las flexiones de diamante
Las flexiones diamante son una excelente manera de trabajar la fuerza de los brazos, pero también todos los músculos del tren superior del cuerpo.
Sin duda, los grandes beneficiados son los tríceps y el pectoral mayor, seguidos de los abdominales y los músculos lumbares. Estos últimos trabajan para mantener una posición adecuada mientras estamos realizando el ejercicio.
Las diamond push ups implican un movimiento intenso, por lo que las personas que las practican por primera vez pueden hacerlas apoyando las rodillas en el suelo y con los pies más separados entre sí. De esta manera, disminuirás la dificultad de ejecución del ejercicio.
Aun así, al hacer flexiones diamante notarás un gran trabajo realizado por parte de tus músculos desde el primer momento, especialmente cuando acumules varias repeticiones.