A pesar de la reciente popularidad por los buenos hábitos y por llevar una vida saludable, los datos oficiales detectan que el consumo de fruta en España continúa descendiendo. Cada ciudadano ingiere 78,6 kilos de frutas en un año, lo que supone un 24,8 % menos que hace una década, según informe EFE salud.
En este contexto, es posible que uno de los motivos por los que los españoles hayan reducido su consumo de fruta es porque únicamente la consumen como postre. A pesar de que esto sea un hábito excelente, cada vez más expertos recomiendan añadirlas a primera hora del día.
De todas las que triunfan en los hogares españoles desde hace años, como las naranjas o las manzanas, existe un grupo de frutas que cada vez conquista más paladares: los frutos rojos, como las fresas, las frambuesas y, en especial, los arándanos. Unas pequeñas bayas de color azul con un sinfín de beneficios para la salud, especialmente, a primera hora.
Los beneficios de desayunar arándanos a diario
Los arándanos son una de las frutas más beneficiosas de todas, lo cual no es de extrañar, considerando que contienen una gran cantidad de vitaminas y minerales y más antioxidantes que cualquier otra fruta, según un estudio de 2021 publicado en Molecules.
De todas sus características, la que destaca entre los demás es su capacidad antioxidante. Los arándanos están repletos de antocianinas, que se sabe que ayudan a reducir el riesgo de enfermedades crónicas. Según una revisión de 2020 en Advances in Nutrition, estos compuestos combaten el estrés oxidativo y la inflamación, dos factores importantes en el desarrollo de enfermedades crónicas.
El consumo regular de antioxidantes puede contribuir a un envejecimiento saludable. La vitamina A y el retinol, protegen la piel de los signos de la edad y estimulan la producción de colágeno, por lo que no solo evitamos posibles enfermedades, sino que tenemos como resultado una piel más suave y firme.
Además de la vitamina A, los arándanos contienen vitamina C, una de las primordiales en cuanto al envejecimiento se refiere. Los antioxidantes son necesarios para mantener una buena visión y reducir potencialmente el riesgo de degeneración macular relacionada con la edad.
Los arándanos también son conocidos por ser aliados del cerebro. Varios estudios sugieren que su consumo regular puede mejorar la función cognitiva y la memoria, lo que es particularmente beneficioso a medida que envejecemos.
Un estudio de la especialista en nutrición de Harvard, Uma Naidoo, ha revelado que el arándano puede ayudar a la memoria. La experta ha explicado que consumir estas frutas "puede contribuir a una disminución significativa en el riesgo de desarrollar problemas neurológicos, a la vez que ayuda a mejorar la salud mental, aumentando la concentración".
Esto se debe en parte a su capacidad para reducir la inflamación y mejorar la comunicación entre las células cerebrales. Además, pueden ayudar a retrasar el deterioro cognitivo relacionado con la edad y reducir el riesgo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Otro de los beneficios de desayunar arándanos es su impacto positivo en la salud cardiovascular. Su alto contenido en fibra, potasio y compuestos polifenólicos puede ayudar a reducir la presión arterial, mejorar los niveles de colesterol y disminuir la rigidez arterial.
Esto contribuye a mantener una mejor circulación sanguínea y a reducir el riesgo de enfermedades del corazón. Además, la fibra presente en los arándanos promueve una digestión saludable, ayudando a mantener el sistema digestivo en equilibrio y a evitar problemas como el estreñimiento.
El control del azúcar en sangre es otro aspecto positivo del consumo diario de arándanos, especialmente relevante para personas con riesgo de diabetes o con esta condición. A pesar de ser frutas, tienen un índice glucémico bajo, lo que significa que no provocan picos bruscos en los niveles de azúcar.
Además de todos estos beneficios, los arándanos son bajos en calorías y ricos en vitaminas y minerales esenciales. Su bajo contenido calórico los convierte en un fantástico componente de un desayuno saludable para quienes buscan controlar su peso sin sacrificar la calidad nutricional de su dieta.
Cómo consumir arándanos
A pesar del sinfín de beneficios que pueden aportar los arándanos, es posible que no sean adecuados para personas con sensibilidad o alergias. Estas pequeñas bayas contienen salicilatos, sustancias químicas naturales que se encuentran en la aspirina y en muchas frutas y verduras.
Estas sustancias químicas pueden causar problemas a las personas con sensibilidad a los salicilatos, por ello, si queremos añadirlos a nuestros desayunos diarios y sufrimos alergias a algunos alimentos, lo mejor es consultar con nuestro médico.
Según la Universidad de Harvard, hay que comer una cantidad mínima de bayas para obtener beneficios para el corazón. Por ello, lo ideal es comer arándanos tres veces por semana.
En el caso de que no suframos alérgicos y estemos seguros de que los arándanos nos sientan bien, son una de las frutas más versátiles de todas, por lo que podemos desayunarla de muchas maneras.
Una de las formas más sencillas y sabrosas de disfrutar de los arándanos es espolvoreándolos sobre el cereal, la avena o el yogur del desayuno. Su dulzura complementa perfectamente estos alimentos básicos del desayuno y, al mismo tiempo, aporta una dosis saludable de antioxidantes y nutrientes esenciales.
También podemos hacer un batido de arándanos. Lo único que tenemos que hacer es mezclar un puñado con otras de nuestras frutas favoritas y añadir leche o yogur. Además, la dulzura natural de los arándanos ayuda a reducir la necesidad de agregar azúcares.