Existen algunos pequeños cambios que, aplicados de buena mañana, nos pueden ayudar a perder peso y, casi, lo más importante: no recuperarlo. Incluir comportamientos saludables al arrancar el día nos puede ayudar a comenzar con el pie derecho.

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Ya sea para mejorar la salud o por vernos mejor, la pérdida de peso es un objetivo común y, a veces, puede parecer imposible. No importa cuáles sea el objetivo, a veces incluso bajar un par de kilos se convierte en toda una odisea. Pero, lo cierto, es que adelgazar algunos kilos no tiene por qué implicar un cambio drástico de dieta y estilo de vida.

Te explicamos 5 sencillos hábitos matutinos para incorporar a primera hora del día que serán tus grandes aliados en los esfuerzos por perder peso.

1. Haz ejercicio

Hacer algún tipo de actividad física a primera hora del día puede ayudar a impulsar a pérdida de peso, de hecho se ha demostrado que está asociado con un mayor nivel de saciedad.

Hacer ejercicio por la mañana también puede ayudar a mantener estables los niveles de azúcar durante todo el día. Un nivel bajo de azúcar puede llegar a provocar muchos síntomas negativos, incluido sentir un hambre excesiva.

Una manera fácil de cumplir con el sol y el ejercicio es ir caminando al trabajo.

2. Bebe mucha agua

Comenzar la mañana con un vaso o dos de agua es una manera fácil de mejorar la pérdida de peso ya que puede ayudarte a aumentar el gasto de energía, es decir, la cantidad de calorías que tu cuerpo quema, durante al menos 60 minutos.

Comenzar la mañana con agua y mantenerse bien hidratado durante todo el día es una excelente manera de impulsar la pérdida de peso con el mínimo esfuerzo.

Además, beber agua puede reducir el apetito y la ingesta de alimentos en algunas personas. De hecho, la mayoría de los estudios sobre el tema han demostrado que beber de 1 a 2 litros de agua por día puede ayudar a perder peso.

3. Pésate

Subir a la báscula cada mañana puede ser un método efectivo para aumentar la motivación y mejorar el autocontrol. Varios estudios han asociado pesarse a diario con una mayor pérdida de peso.

Pesarse todas las mañanas también puede ayudar a fomentar hábitos y comportamientos saludables que pueden promover la pérdida de peso. Además, en las investigaciones llevadas a cabo, aquellas personas que dejaron de pesarse con frecuencia tenían más probabilidades de aumentar su ingesta de calorías y una disminución de la autodisciplina.

Para conseguir mejores resultados, pésate justo cuando te despiertes, después de ir al baño y antes de comer o beber algo.

Eso sí, el peso puede fluctuar de un día para otro y puede verse alterado por una gran variedad de factores. Lo importante es centrarse en el panorama general y buscar las tendencias generales de pérdida de peso, en lugar de obsesionarse con los pequeños cambios diarios.

4. El desayuno, rico en proteínas

Diferentes estudios han demostrado que un desayuno rico en proteínas puede ayudar a perder peso, ya que consigue reducir los antojos, el apetito y la secreción de grelina.

El desayuno se considera la comida más importante del día porque lo que comemos en el desayuno puede llegar a definir cómo nos va el resto del día. Además, incluir proteína también nos puede ayudar a perder peso al disminuir los niveles de grelina, la 'hormona del hambre', conocida así porque es la responsable de aumentar el apetito.

Opciones de alimentos que se consideran fuentes de proteínas y que se pueden incluir en el desayuno para comenzar bien el día son los huevos, el skyr, el yogur griego, el requesón, el pavo, las nueces o las semillas de chía.

5. Toma un poco el sol

Pasar unos minutos más al aire libre cada mañana puede ayudarnos a comenzar a perder peso. De hecho, son varios los estudios que concluyen que la exposición a la luz solar de la mañana influye en la grasa corporal, así como en el nivel de hormonas reguladoras del apetito

La exposición a la luz solar también es la mejor manera de satisfacer sus necesidades de vitamina D, que también se ha demostrado que puede ayudar a adelgazar e incluso prevenir el aumento de peso.

La cantidad de tiempo de exposición al sol que se necesita puede variar según el tipo de piel, la estación del año y la ubicación. Por lo general, dejar entrar un poco de luz solar o sentarse al aire libre durante 10 a 15 minutos cada mañana puede tener un efecto beneficioso sobre la pérdida de peso.