Los superalimentos son cada vez más famosos en España. Aportan múltiples beneficios a la salud debido a sus nutrientes, vitaminas y minerales. Entre ellos podemos destacar favorecer la pérdida de peso, disminuir los niveles de azúcar en la sangre o contribuir a la eliminación de toxinas. Por este motivo, cada vez más personas se centran en conocer cuáles pertenecen a esta categoría, para poder añadir a sus rutinas.
Sin embargo, no siempre ha sido así. Hasta hace unos años, muchos de estos alimentos 'milagrosos' eran desconocidos en España, pero sus propiedades habían sido valoradas en otras regiones o culturas durante miles de años. Cuando llegaron a los países occidentales, más que beneficiosos eran considerados como comidas "exóticas" o "novedosas" que miles de personas tendían a evitar, como la quinoa o el té matcha.
Poco a poco fuimos descubriendo que todas las propiedades que tenían estos novedosos alimentos, también las tenían centenares de los que consumíamos diariamente, por lo que comenzamos a valorarlos más, no solo nosotros, sino también múltiples expertos y profesionales de la salud. Entre ellos podemos destacar algunos como el plátano, el aguacate o algunos frutos secos.
Estos últimos han causado revuelo desde que los conocemos. El imaginario colectivo relaciona el consumo de frutos secos con otros alimentos, como las patatas fritas. Lo cierto es que su fama ha hecho que diferentes empresas y supermercados comercialicen con sus variantes, que son cuanto menos saludables. Sin embargo, los nutricionistas llevan años recomendándolos por todos sus beneficios, principalmente adelgazantes.
No obstante, a pesar de todas sus ventajas, no todos los frutos secos se pueden consumir diariamente. Los cacahuetes o los piñones, por ejemplo, no son tan beneficiosos como las nueces o las almendras, siendo estas dos últimas las opciones más recomendadas entre la gran lista por sus propiedades.
Estos son todos los beneficios de comer almendras
A pesar del gran valor nutricional de los cacahuetes, son las almendras en las que vamos a centrarnos hoy. Una larga lista de nutrientes esenciales y beneficios son los que las convierten en el superalimento perfecto, no solo para adelgazar, sino también para conseguir otras ventajas aprobadas por expertos e investigaciones alrededor del mundo.
Tan solo 100 gramos de almendras contienen 21 gramos de proteínas, una porción mayor que los huevos (13 g). Las proteínas son fundamentales de cara a nuestra dieta, ya que ayuda a nuestro cuerpo a reparar células y producir nuevas. Además, gracias a su relevancia de cara al crecimiento y desarrollo, este fruto seco puede ser perfecto para agregar a la dieta de los más pequeños.
Añadido a su valor proteico, una investigación publicada en la revista Obesity sugiere que las almendras pueden ser una adición fantástica en las dietas para bajar de peso. El estudio encontró que las personas que comían almendras como parte de una dieta restringida en calorías perdieron alrededor del 9,3% de su peso corporal, pero además, experimentaron mejoras en varias medidas de salud cardiometabólica, como la presión arterial, el azúcar en sangre y los lípidos.
Las almendras también presentan un alto contenido en grasas monoinsaturadas. Las grasas siguen teniendo esta imagen negativa con respecto al colesterol y el control del peso; sin embargo, son nutrientes esenciales que deben formar parte de una dieta equilibrada. Protegen el corazón y reducen potencialmente la formación de placa que puede provocar obstrucción de las arterias y aumentar nuestro colesterol bueno HDL.
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Además, este fruto seco son una gran fuente de antioxidantes. Estos componentes ayudan a proteger contra el estrés oxidativo, que es el que puede dañar las moléculas de las células y contribuir a la inflamación, el envejecimiento y enfermedades como el cáncer. Sin embargo, no todas las almendras son igual de antioxidantes, ya que estos tienden a concentrarse en la capa marrón de la piel, por lo que las almendras blanqueadas (aquellas a las que se les ha quitado la piel) tienen menos capacidad.
Las almendras se contemplan como el alimento que podemos comer a todas horas, pero como pasa con todo, nunca puede ser en exceso. Tienen una gran capacidad saciante, que ayudará a evitar la ingesta de otros alimentos o del mismo, por lo que nos ayudará a controlar las proporciones. Al tener una gran cantidad de calorías, es importante tener en cuenta cuánto tomamos al día.