Tacones ¡Descubre los trucos para que no te duela la espalda!

Tacones ¡Descubre los trucos para que no te duela la espalda!

Salud y Bienestar

El truco infalible para llevar tacones sin que te duela la espalda

Los tacones cuanto más altos más estilizan, pero esto nos hace pagar un precio muy alto, el dolor de espalda. A continuación, apunta estos consejos y minimiza los efectos adversos de usar este tipo de calzado.

22 noviembre, 2022 11:44

Seguro que has llevado tacones para esa ocasión especial y más de una vez has acabado con dolor de espalda. Sin embargo, con nuestros trucos, podrás llevar tacones sin que te duela la espalda nunca más. Olvídate del dolor de pies y espalda. Con nuestras recomendaciones podrás llevar tacones durante horas sin tener que sufrir por ello.

[El truco definitivo para llevar tacones sin que te salgan ampollas]

Aunque hay que tener en cuenta que no es recomendable llevar tacones durante todos los días de la semana. Incluso los médicos aconsejan que no se usen tacones durante periodos de tiempo prolongados, porque podríamos causar lesiones en los pies o en la columna.

Lo más recomendable es utilizar un calzado cómodo a diario que permita estabilidad a tu cuerpo. Para ello, es necesario que los pies estén bien sujetos y que los dedos no se sientan presionados.

¿Sabías que los zapatos idóneos son aquellos que no son completamente planos, pero que tampoco poseen un tacón excesivo? De hecho, usar tacones supone que el peso de tu cuerpo va a parar a un único punto de apoyo, provocando con ello, molestias en los pies, rodillas e incluso lesiones en la columna.

[Trucos para aguantar los tacones sin dolor de pies]

Ten en cuenta que el peso corporal normalmente se reparte por tus pies de manera proporcional. Sin embargo, cuando utilizas tacones, el peso corporal que recae en un único punto puede llegar a ser un 75% más elevado que el que estás normalmente acostumbrado a soportar y eso puede producir daños irreversibles.

Para evitar esas lesiones y molestias en tus pies, rodillas y espalda, te dejamos los trucos más efectivos.

Entrenamiento

Llevar tacones no es una tarea fácil. De hecho, los médicos recomiendan que cuando se vaya a usar tacones por primera vez, se haga durante períodos cortos de tiempo y con descansos. 

Además, es recomendable que se vaya cambiando de postura y no se permanezca de pie todo el rato. De esta manera, los músculos del cuerpo podrán ir adaptándose poco a poco a la nueva postura de llevar tacones.

Los tacones de más de 5 centímetros no son nada recomendables. De hecho, si te acabas de comprar unos tacones nuevos, será mejor que camines por dentro de casa en distancias cortas hasta que tus pies y espalda se acostumbren a llevarlos.

[¿Puede mi empresa obligarme a llevar zapatos de tacón?]

Por otro lado, puede que notes pequeñas molestias en los dedos de los pies. En ese caso, lo mejor es humedecer papel de periódico y arrugarlo en forma de bola para introducirlo presionando en la puntera de tus zapatos. ¡Verás como si lo dejas así durante 48 horas ya no te harán rozaduras en los dedos de los pies!

¿Qué tacón elegir?

Puede que te gusten los tacones finos y altos. Aunque si no estás acostumbrada a llevarlos, es mejor que empieces con unos tacones anchos o zapatos de plataforma.
Este truco hará que tus pies se adapten mejor al cambio de calzado y de esta manera, no te verás forzado a someter a tu espalda a un esfuerzo excesivo.

[Trucos para parecer más alta sin tener que usar tacones]

Practica las veces que haga falta y cuando te sientas preparada, será el momento de escoger un tacón algo más fino.

La importancia de los descansos

Es importante que hagas pequeños descansos cuando lleves tacones, ya que si no lo haces, tu espalda, rodillas y pies se verán sometidos a posturas inadecuadas y forzadas provocando:

  • Rozaduras.
  • Hinchazones.
  • Dolores musculares.
  • Pinzamientos.

Una manera efectiva de evitar que estos síntomas te afecten es masajear los pies y las piernas cuando hagas los descansos. De esta forma, activarás la circulación sanguínea de tu organismo y eso hará que aguantes con los tacones más tiempo.

En el caso de que los descansos los realices en tu hogar, es mejor que te quites los tacones para que el pie pueda cambiar de postura. Incluso, puedes sumergirlo en agua fría con sal para que desinflame la zona afectada.

Y si quieres que tus pies y tu espalda se coordinen en una absoluta relajación, puedes tumbarte en el sofá y colocar un cojín debajo de los pies para tenerlos en alto. ¿A qué es relajante?

¿Cómo saber si el zapato es adecuado?

Si no quieres tener molestias en tu espalda, deberás escoger zapatos de tu talla. Piensa que, si el zapato es de una talla menor, estarás provocando rozaduras y ampollas indeseadas a tus pies.

Por el contrario, si el zapato es demasiado ancho el pie no estará sujeto y eso también provocará molestias. Lo ideal es que escojas un zapato de tacón de tu talla y a ser posible que tenga pulsera en el tobillo y tiras en la parte del empeine. De esta manera, tu pie irá mucho más sujeto y evitarás la mayor parte de las molestias.

Si aún así te molestan los tacones, puedes comprar almohadillas de las que se ponen debajo de los dedos de los pies o en la parte del talón.

Otros trucos para evitar molestias en la espalda

Las molestias en la espalda provienen de las malas posturas que hacemos al caminar cuando no tenemos tacones de nuestra talla o sentimos molestias en las rodillas o los pies.

Por este motivo, hemos elaborado una lista de trucos para enseñarte a evitar esas dichosas molestias:

  • Hidratar los pies y los zapatos con crema. Lo único que necesitas es tener los pies bien hidratados para evitar rozaduras. Sin embargo, si untas la parte interior de tus zapatos con crema y la dejas secar unas horas. El material se agrandará y evitarás las rozaduras indeseadas.
  • Evita las suelas delgadas porque provocan un mayor impacto en el suelo y no hay casi amortiguación en los pies.
  • Ensancha tus tacones introduciendo bolsas de agua en las punteras e introduciéndolos en el congelador durante 24 horas.

Ahora que ya conoces todos los trucos para llevar tacones correctamente. ¿A qué esperas para ponerlos en práctica?