El Gobierno británico ha hecho público este lunes su estrategia para combatir el extremismo religioso e ideológico en Reino Unido
El plan, detallado en 136 puntos, pretende frenar a “aquellos que buscan difundir el odio”, en palabras de la ministra de Interior, Theresa May, desde islamistas radicales a neonazis.
El Gobierno alega en su plan que los delitos de odio -contra minorías y grupos religiosos- han aumentado un 18% en los últimos cinco años, al tiempo que unos 750 individuos vinculados a Reino Unido se han sumado a las fuerzas del Estado Islámico en Oriente Medio.
En conjunto, la estrategia constituye una cruzada contra las ideas extremistas y sus divulgadores en todo el sector público, desde los centros educativos a la administración. Aquí tiene un esquema de los puntos principales del plan:
1. Se revisarán todas las instituciones públicas, de las autoridades locales al sistema sanitario, para combatir la intrusión de extremistas en el sector público y se presentarán los resultados de la pesquisa el año que viene.
2. Se investigará la aplicación de la ley islámica en Reino Unido.
3. Se establecerán mecanismos para permitir la intervención en escuelas sospechosas de inculcar ideas extremistas. En su discurso en el congreso anual del Partido Conservador hace unas semanas, el primer ministro, David Cameron, ya dijo que cerraría las escuelas religiosas que promovieran la intolerancia, con especial mención a las madrasas.
4. Se creará un sistema para garantizar que la policía se tome en serio e investigue denuncias a presuntos extremistas.
5. Se suspenderán servicios de televisión y radio cuando se emitan contenidos extremistas.
6. Las autoridades trabajarán con las empresas para retirar contenido en internet que promueva el extremismo y el terrorismo.
7. Se endurecerán los requisitos para obtener la nacionalidad británica y se revisará con mayor atención el historial de los solicitantes de visados.
El Consejo Musulmán de Reino Unido ha advertido que la estrategia puede resultar “contraproductiva al alienar precisamente a las personas necesarias para enfrentarse al terrorismo vinculado a Al Qaeda o al Estado Islámico: las comunidades musulmanes británicas”.
Mientras, la Unión Europea celebra este lunes su primera conferencia para prevenir la radicalización en las prisiones. La conferencia acoge, entre otros, a parlamentarios europeos y ministros de Justicia de la Unión. “La radicalización es una amenaza que crece en toda Europa”, ha afirmado la comisaria de Justicia, Consumo e Igualdad de Género, Věra Jourová, en un comunicado.