A las 11:53 de la mañana de este martes ha despegado en el aeropuerto de Zaventem el primer vuelo con destino a España desde los ataques del 22 de marzo en Bruselas, en los que murieron 32 personas. Lo operaba la compañía belga Brussels Airlines y su destino era Bilbao.
La actividad de Zaventem se reanuda de forma progresiva, pero costará “meses” volver a la normalidad. Las explosiones del 22-M destrozaron el vestíbulo de salidas, que ahora debe rehabilitarse. Mientras tanto, se han construido unas instalaciones provisionales para los mostradores de embarque. El resultado es que el aeropuerto sólo puede operar al 20% de su capacidad, es decir, alrededor de 800 pasajeros por hora, según ha explicado a EL ESPAÑOL una portavoz.
Los primeros vuelos de pasajeros se reanudaron de forma simbólica el domingo 3 de abril, 12 días después de los ataques. Ese día sólo hubo tres vuelos, con destino a Faro en Portugal, Turín en Italia y Atenas en Grecia. La cifra ha aumentado progresivamente hasta las 40 operaciones el lunes y los 100 vuelos previstos para este martes. Hasta ahora no se han registrado problemas.
Ibería tiene previsto reanudar sus conexiones con Zaventem este martes, con un vuelo que saldrá de Madrid a las 19:40 y tiene previsto aterrizar en Bruselas a las 22.00 horas. A partir del miércoles, habrá dos conexiones diarias de Iberia entre Madrid y Zaventem. También Air Europa realizará un vuelo diario (el de la tarde) a Zaventem desde el 6 de abril.
Soldados belgas vigilan las instalaciones provisionales de Zaventem
De momento, es imposible precisar cuándo regresarán al aeropuerto de Bruselas el resto de compañías que operan rutas a España ni cuántos vuelos habrá esta semana porque la situación cambia “casi cada minuto”, según explica la portavoz. Las compañías necesitan tiempo para organizar el cambio de un aeropuerto a otro. Además, teniendo en cuenta la restricción de capacidad, muchas aerolíneas no podrán volver a Zaventem hasta que se recupere totalmente la normalidad.
Acceso limitado al aeropuerto
Además de la compañía belga Brussels Airlines, que ha perdido cinco millones de euros diarios por el cierre del aeropuerto, las primeras aerolíneas en volver a Zaventem han sido Iberia, la alemana Lufthansa, la irlandesa Aer Lingus, la polaca Lot y la rumana Tarom.
Por motivos de seguridad, sólo pueden acceder al aeropuerto los pasajeros que tienen tarjeta de embarque. Únicamente puede llegarse en taxi o coche particular, porque tanto el tren como el autobús a Zaventem no han vuelto a operar desde los atentados. Debido a los controles de los equipajes a la entrada, el aeropuerto aconseja a los pasajeros llegar con al menos tres horas de antelación.