La expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner ha recibido el apoyo de sus seguidores en el día que ha acudido ante un tribunal federal de Buenos Aires como imputada por presunto lavado de dinero.
Su comparecencia se ha reducido prácticamente a la presentación de un escrito ante el juez federal Claudio Bonadio, quien investiga presuntas irregularidades en la venta de dólares a futuro a través del Banco Central por debajo de precios de mercado durante su mandato.
"Confirmo claramente que sólo a través del ejercicio abusivo de poder jurisdiccional esta causa pudo ser llevada adelante", ha manifestado a través del escrito en un tono desafiante que ha mantenido a su salida del juzgado, que también ha publicado en su cuenta de Facebook.
CFK había abandonado su domicilio sonriente antes de dirigirse al juzgado, una sonrisa que no la ha abandonado a su salida.
El apoyo de sus seguidores antes, durante y después de su comparecencia se ha hecho notar en las calles de la capital argentina, a pesar de la lluvia.
Sobre un escenario montado frente al edificio judicial, CFK ha declarado: "Me pueden citar 20 veces, me pueden meter presa, pero no van a hacer que deje de decir lo que pienso. No me van a callar", recoge el diario argentino 'La Nación'.
"Si pudieran prohibir la palabra K del vocabulario, lo harían", ha asegurado.