Thomas Mair compareció este sábado en los magistrados de Westminster donde fue acusado formalmente por el crimen de la diputada laborista Jo Cox. Mair, de 52 años, gritó “Muerte a los traidores y libertad para el Reino Unido” cuando le preguntaron por su nombre, una consigna que confirma su vinculación con la extrema derecha. El acusado permaneció en silencio cuando fue preguntado por su dirección y por su fecha de nacimiento.
La comparecencia de Mair fue muy breve. Lo hizo vestido con jersey gris, pantalones de chándal, zapatos negros y esposado. Fue acusado de los delitos de agresión y posesión de armas y del asesinato de Jo Cox el pasado jueves en la localidad del norte de Inglaterra de Birstall. Deberá comparecer este lunes en el Tribunal de Old Bailey.
Thomas Mair tiene un largo historial de trastornos mentales. Hacía 40 años que vivía en la misma casa y había sido descrito por los vecinos de Birstall como solitario y callado, un tipo muy raro que se ganaba la vida como jardinero y vivía “aislado socialmente y desconectado de la sociedad”. Le habían diagnosticado como obsesivo compulsivo y fue tratado de depresión. Scott Mair, el hermano mayor del presunto asesino contó a la prensa local que su hermano tenía “un historial de enfermedades mentales” pero que “ya había recibido ayuda”.
La policía está investigando sus vínculos con la extrema derecha. Mair mantuvo vínculos con el grupo neonazi estadounidense National Alliance. También se sabe que entre 1999 y 2003 se gastó dinero en la compra de manuales de fabricación de armas caseras y de explosivos. Según explica la prensa británica, la policía habría encontrado uniformes y literatura nazi en su casa.
El presunto asesino disparó tres veces a la política el pasado jueves y la apuñaló cuando estaba en el suelo después de gritar “Gran Bretaña primer”, según el testimonio de algunos vecinos. Jo Cox, de 41, salía de una reunión con sus votantes en Birstall. Era una parlamentaria muy querida y enfocada a la ayuda humanitaria, que tenía dos niñas de 3 y 5 años. Su asesinato ha conmocionado al país. La campaña del referéndum está suspendida desde hace tres días.