Los 400 puntos de wifi gratuitos que se habían instalado en las calles de Nueva York se van a 'apagar' desde este viernes después de que se detectara que están siendo monopolizados por usuarios que los utilizaban para ver pornografía, según las autoridades locales. 

Estos kioskos de internet, como se conocía al servicio LinkNYC, fueron instalados en febrero en el lugar de las antiguas cabinas y ofrecían hasta 300 megas totalmente gratuitas, la posibilidad de hacer videollamadas, una pantalla táctil y hasta puertos de USB.

Sin embargo, sólo unos meses después, el consorcio de LinkNYC estudia soluciones a los abusos que se han detectado por parte de muchos usuarios y a las denuncias presentadas: "Los kioskos nunca fueron destinados al uso personal de nadie sino que era una red de conexión para la gente que se movía por Nueva York e incluso aseguraban internet en muchas zonas que no eran accesibles", asegura LinkNYC en un comunicado.

Una portavoz del alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, ha explicado que el Ayuntamiento ha atendido las denuncias de muchos vecinos que aseguraban que personas sin hogar utilizaban estos puntos y sus pantallas durante horas para ver películas e incluso pornografía, pese al sistema de filtros que se supone tienen estos puntos para evitar contenido inapropiado.

Los quioscos todavía permitirán hacer llamadas nacionales gratuitas, avisos de emergencia, consultar los mapas y navegadores de la ciudad y la carga rápida del teléfono móvil.