Tres personas han sido detenidas en la localidad de Chemnitz (este de Alemania) por su relación con un hombre de origen sirio al que se sigue buscando y en cuya vivienda se encontraron "varios centenares de gramos" de explosivos.
El portavoz de la Oficina de lo Criminal (LKA) de Sajonia, Tom Bernhardt, indicó que el principal sospechoso, al que se busca por preparar explosivos para perpetrar un atentado, no ha sido aún arrestado.
Fuentes de la lucha antiterrorista no identificadas han señalado que la operación policial ha frustrado un ataque islamista, según recogen algunos medios de comunicación.
La policía de Sajonia ha identificado al sospechoso fugado como Jaber Albakr, un sirio de 22 años nacido en la localidad de Saasaa, en este estado alemán.
Los tres detenidos son "conocidos" del sirio al que se persigue. Dos fueron arrestados en las proximidades de la estación central de Chemnitz y el tercero en el centro de la ciudad.
Los artificieros de la policía se encuentran aún en la vivienda registrada ya que los explosivos, según informó Bernhart, deben ser desactivados allí mismo porque no se pueden mover.
El portavoz explicó además que la operación se puso en marcha después de que el viernes se recibiera información de los servicios secretos en la que se alertaba sobre el "serio peligro" que representaba el sospechoso.
La operación de las fuerzas de seguridad desató cierta alarma en el área conocida como Fritz-Heckert, una zona de grandes edificios residenciales levantados durante la era comunista.
La policía evacuó al menos un bloque de apartamentos y pidió a los vecinos que permaneciesen "dentro de sus casas" durante el operativo.
La única explosión registrada en la zona fue la que realizaron los propios miembros de las unidades especiales para acceder al piso utilizado por el sospechoso.
Sajonia, cuna del grupo Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente (Pegida), ha sido escenario de múltiples incidentes xenófobos en los últimos meses, incluidos varios ataques incendiarios contra centros de refugiados.
Alemania sufrió dos ataques yihadistas en julio, ambos perpetrados por solicitantes de asilo, en los que murieron dos terroristas y veinte personas resultaron heridas.