La Fuerza Aeroespacial del cuerpo de elite de los Guardianes de la Revolución de Irán comenzó este sábado una serie de maniobras militares que incluyen la prueba de sistemas de radar y misiles de fabricación local.
Estos ejercicios castrenses se producen en medio de una escalada de la tensión con Estados Unidos, que el viernes impuso sanciones a 13 individuos y 12 entidades relacionados con el programa de misiles balísticos de Teherán, que anunció por su parte medidas recíprocas.
Según un comunicado publicado por los Guardianes de la Revolución en su página Sepahnews, las amplias maniobras se realizan en un área de 35.000 kilómetros cuadrados en la provincia de Semnan, en el noreste del país.
"El objetivo es mostrar la capacidad y preparación (de Irán) para actuar contra cualquier amenaza e infravalorar las sanciones", agregó la nota, en alusión a EEUU.
La etapa principal de los ejercicios 'Defensores de Harim de Velayat' arrancó este sábado tras cinco días de trabajo preparatorio, en el marco de los esfuerzos del Ejército para fortalecer su capacidad defensiva.
Los simulacros incluyen tres tipos de sistemas de misiles, entre ellos 'Sevon Jordad' y 'Sayad 2', con un rango de alcance de 75 kilómetros, que son capaz de actuar contra varios objetivos hostiles y cuentan con la tecnología más actual.
Entre los sistemas de radar destaca el de largo alcance 'Qadir', que es tridimensional y detecta y rastrea amenazas en el aire a un rango de 1.100 kilómetros.
El sábado, el director interino de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro, John Smith, dijo que "el continuado apoyo de Irán al terrorismo y el desarrollo de su programa de misiles balísticos supone una amenaza".
El Ministerio de Exteriores iraní respondió que su sistema de misiles "solo tiene fines defensivos y es para portar armas convencionales".
Las autoridades iraníes revelaron asimismo que impondrán "restricciones legales a un número de individuos y entidades implicadas en la financiación y apoyo a grupos extremistas en la región", cuyos nombres darán a conocer más adelante.
Se eleva la tensión
Horas antes, el presidente estadounidense, Donald Trump, alertó a Irán de que "está jugando con fuego", a lo que el jefe de la diplomacia persa, Mohamad Yavad Zarif, contestó que su país no va a iniciar una guerra pero ejercerá la legítima defensa de ser necesario.
La relación entre ambos países se ha tensado en extremo desde que Trump ordenara suspender por tres meses la emisión de visados a los nacionales de Irán y otros seis países de mayoría musulmana.
La República Islámica decidió aplicar una medida recíproca contra los ciudadanos estadounidenses.
También ha agravado la situación la prueba con misiles efectuada por Irán el domingo pasado, a la que Washington ya amenazó con responder.