El grupo terrorista Estado Islámico (EI) asesinó y colgó de postes de la luz a 25 civiles que intentaban huir de las zonas del oeste de la ciudad septentrional iraquí de Mosul que todavía controlan los yihadistas.
El jefe del Consejo de Seguridad de la provincia de Nínive -de la que Mosul es capital-, Mohamed Ibrahim al Bayati, dijo que el EI mató a los 25 civiles en el barrio de Al Tank cuando intentaban alcanzar las zonas liberadas por las fuerzas de seguridad iraquí.
Detalló que los miembros radicales "los detuvieron y los mataron, y luego colgaron sus cadáveres en los postes de electricidad del barrio de Al Tank".
Lanzamiento de morteros
Al Bayati agregó que EI también lanzó 40 proyectiles de mortero contra los barrios de Al Matahen y Al Yarmuk, lo que provocó el pánico entre la población. Como consecuencia de los disparos, que causaron un número indeterminado de heridos, varias familias huyeron a zonas más seguras.
Por su parte, el comandante de las Operaciones Conjuntas, el general Abdelamir Yarala, anunció en un comunicado que las fuerzas antiterroristas "liberaron el barrio de Al Matahen por completo" tras días de combates.
Además, un comandante de las Fuerzas Especiales antiterroristas, el general Maan al Saadi, explicó a Efe que sus tropas liberaron más del 90% del barrio de Al Yarmuk. Al Saadi precisó que las fuerzas iraquíes se encuentran en las entradas de los barrios occidentales de Al Islah, Al Zeraai, Al Abar y Al Zaura. Añadió que las Fuerzas Especiales mataron a 35 terroristas y destruyeron cuatro vehículos bomba, en su lento avance.
Ataque a las líneas de suministro
En otro comunicado, el comandante de la Policía Federal, Raid Shaker Yaudat, informó de que las fuerzas de este cuerpo de combate cumplieron con el 60 por ciento de su tarea de destruir las líneas de suministro de los yihadistas en torno a la Mezquita Al Nuri, lugar donde el máximo dirigente del EI, Abu Bakr al Bagdadi, proclamó el "califato" en junio de 2014, y donde los extremistas no dan su brazo a torcer.
En el barrio 17 Tamuz, los uniformados mataron a seis líderes en un centro de control de los yihadistas, entre ellos un exoficial del Ejército iraquí identificado como Harez Abdalá Salman. Entre los cabecillas fallecidos del EI se encuentran responsables de combate, de la seguridad, la administración y los servicios de inteligencia del grupo, según Yaudat.
En el este de Mosul, liberado por las tropas iraquíes el pasado 24 de enero, el gobernador de Nínive, Nofal al Sultan, salió ileso de un atentado con bomba contra su convoy que solo causó leves destrozos a un vehículo.
Un comunicado emitido por la oficina de información de la provincia explicó que la explosión tuvo lugar en el barrio de Al Sukar cuando el responsable regional se dirigía a un hospital. Las fuerzas iraquíes comenzaron el pasado 19 de febrero la ofensiva para liberar la parte occidental de Mosul, después de haber completado la reconquista de la mitad este.