Cuatro personas resultaron heridas de gravedad en un tiroteo en una estación de trenes de Múnich, entre ellas una agente, que se encuentra en estado crítico, y un sospechoso, que ha sido detenido, según informó la policía de la capital bávara.
Según los primeros datos facilitados por la policía, el tiroteo tuvo lugar en el marco de una operación policial rutinaria, cuando los agentes acudieron a mediar en una pelea.
Las fuerzas de seguridad confirmaron que la situación está bajo control y que no hay indicios que apunten a más personas implicadas en el incidente. Una radio local asegura que fuentes de la policía descartan que se trate de un atentado terrorista.
Según informó un portavoz de las fuerzas de seguridad en una breve comparecencia ante la prensa en el lugar de los hechos -la estación de trenes de cercanías de Unterföhring-, la policía recibió el aviso de que en un tren se había producido una pelea entre viajeros.
Al llegar al lugar, los agentes encontraron a los implicados en la pelea en el andén y uno de ellos trató de empujar a un agente a las vías del tren.
El agresor logró quitarle el arma reglamentaria a uno de los policías, momento en el que se produjo el tiroteo: una agente resultó herida en la cabeza y se encuentra en estado crítico y el autor del altercado también fue alcanzado por un disparo y está grave.
Otras dos personas resultaron heridas también de bala y la policía estima, tras una primera evaluación de los hechos, que el autor de los disparos fue el detenido.