El brote de peste que afecta a Madagascar desde finales de agosto se expande más rápido de lo normal, con 300 casos confirmados y 94 fallecidos, informó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El director regional de Emergencias para África de la institución, Ibrahima Soce Fall, señaló en una rueda de prensa que hay 1.153 casos, entre sospechosos y confirmados, y que el riesgo de transmisión es "muy elevado" porque hay un "número importante y mayor" que en anteriores brotes de casos de peste neumónica o pulmonar, la más peligrosa y transmisible de persona a persona.
La peste es endémica en Madagascar y casi todos los años se notifican unos 600 casos durante la temporada epidémica (entre septiembre y abril), según la OMS.
Pese a la mayor cantidad de casos registrada en esta ocasión, la tasa de mortalidad "es más baja", entre un 8 y un 10 %, indicó Fall, aunque advirtió que "hay muchos casos sospechosos aún no confirmados" por el laboratorio.
Señaló que hasta ahora están afectadas 14 de las 22 regiones de Madagascar, y sobre todo la capital, Antananarivo, y Tomasina, en la costa este, donde se originó el pasado 23 de agosto el brote, que fue detectado oficialmente el 11 de septiembre.
La OMS ha puesto en marcha un sistema con unos 2.000 trabajadores para identificar "todos los contactos" de personas posiblemente infectadas para ponerlos bajo profilaxis antibiótica.
Por ello confía en poder contener la transmisión y "revertir rápidamente la tendencia" negativa.
La peste es una enfermedad infecciosa que suele encontrarse en pequeños mamíferos y en las pulgas que los parasitan.
La peste bubónica es la más frecuente y es causada por la picadura de pulgas infectadas, cuyo bacilo entra en el organismo y se desplaza por el sistema linfático hasta el ganglio más cercano, donde se multiplica.
La peste neumónica o pulmonar se produce cuando la peste bubónica avanzada llega a los pulmones, y si no se trata es mortal.
Por otra parte, la OMS trabaja para contener un brote de fiebre hemorrágica de Marburgo detectado el 17 de octubre en el este de Uganda, junto a la frontera con Kenia.
Fall se mostró confiado en que se pueda controlar, dado que ya es la quinta ocasión que Uganda lidia con esta enfermedad y tiene mecanismos para responder.
El virus de Marburgo se transmite por contacto directo con sangre, líquidos orgánicos y tejidos de las personas infectadas, y la OMS y las autoridades ugandesas están vigilando los contactos.
De momento solo hay una muerte confirmada, un caso sospechoso y otro probable, señaló Fall, si bien cientos de personas han sido expuestas al virus en centros de salud y funerales tradicionales en el distrito de Kween District, a unos 300 kilómetros al noreste de Kampala.