El fotoperiodista iraquí Arkan Sharif, que trabajaba para Kurdistan TV, la televisión oficial del Partido Democrático del Kurdistán (PDK) de Masud Barzani, fue asesinado hoy a cuchilladas dentro de su casa en la ciudad de Daquq, en la provincia de Kirkuk (norte).
Los atacantes, que no han sido identificados, huyeron del lugar después del asesinato, que fue perpetrado al amanecer, informó la policía de Kirkuk en un comunicado.
La corte penal anunció la apertura de una investigación del crimen, que en un primer momento se cree que no se trata de un acto terrorista.
Sharif, de 54 años, estaba casado, tenía tres hijos y trabajaba desde 2004 como fotógrafo para Kurdistan TV, canal del PDK, fuerza liderada por el presidente de la región autónoma del Kurdistán, Masud Barzani, quien anunció ayer su dimisión en pleno conflicto territorial con Bagdad.
Tras el anuncio de la renuncia de Barzani, que será efectiva a partir del próximo miércoles, centenares de sus seguidores irrumpieron en el Parlamento regional, en Erbil, y agredieron a un diputado y a los periodistas presentes en la cámara, antes de ser retirados por las fuerzas de seguridad.
Según datos de Reporteros Sin Fronteras (RSF), en lo que va de año han muerto otros siete periodistas en Irak, lo que hace de este país uno de los más peligrosos del mundo para los comunicadores.