La tranquilidad reina este jueves en las calles de Teherán, después de que las autoridades iraníes dieran por finalizadas las protestas antigubernamentales, mientras que en otras ciudades volvieron a celebrarse marchas de apoyo al régimen.
Las principales avenidas y plazas de la capital, incluidas aquellas como Enghelab, escenario de disturbios en los últimos días, permanecieron en calma en esta jornada.
La rutina volvió a adueñarse del centro de la ciudad, donde incluso la presencia policial era la habitual tras varios días de mayor despliegue para contener las protestas.
El comandante en jefe de los Guardianes de la Revolución de Irán, el general Mohamad Ali Yafarí, anunció el miércoles el "fin de la sedición", en referencia a las protestas contra las políticas económicas del gobierno que estallaron el pasado jueves.
Una veintena de personas han muerto en los seis días de protestas y más de mil manifestantes han sido detenidos.
El ministro del Interior iraní, Abdulreza Rahmaní Fazlí, minimizó hoy la importancia de esas manifestaciones antigubernamentales y cifró en un máximo de 42.000 los participantes.
"El motivo de que continuaran las protestas pequeñas en algunas provincias se debió a la tolerancia de las autoridades", adujo el ministro, quien también denunció una conspiración de "los enemigos" de Irán para debilitar al país.
En respuesta a estas manifestaciones, decenas de miles de iraníes tomaron las calles de algunas ciudades el miércoles y el viernes para expresar su apoyo al sistema de la República Islámica y condenar los recientes disturbios.
Los participantes en estas marchas enarbolaron banderas de Irán y fotografías del líder supremo del país, Ali Jameneí, según las imágenes difundidas por la televisión estatal.
"Todos somos tus soldados Jameneí" y "muerte a 'monafeghin", en referencia a la Organización Moyahedin al Jalq, considerada terrorista por Irán, fueron algunos de los lemas coreados en ciudades como Mashad (noreste) e Isfahán (centro).
La Organización de la Promoción Islámica de la provincia de Teherán ha convocado también para mañana, viernes, marchas de condena a las protestas antigubernamentales en el centro de la capital.