En 2011 el actor Seth Meyers bromeó en la tradicional cena de corresponsales de la Casa Blanca con una hipotética candidatura de Donald Trump a la Casa Blanca. Siete años después la broma se ha hecho realidad y anoche el comediante recordó su profecía en el monológo como maestro de ceremonias de los Globos de Oro.
"Algunos me han dicho que esa noche le convencí para que se presentará. Si esto es así, sólo quiero decir una cosa: Oprah, nunca serás presidenta", bromeó el comediante. El chiste hubiera pasado desapercibido en otro momento, pero la turbulenta presidencia de Trump y la falta de liderazgo en el partido demócrata hacen que el nombre de Oprah Winfrey figure en las quinielas para las elecciones de 2020.
Su inspirador y comprometido discurso de anoche sólo ha conseguido, además de remover conciencias, que el rumor de una carrera política para la reina de la televisión estadounidense crezca aún más.
La cuenta en Twitter de la cadena NBC explotó de emoción tras las palabras de Winfrey y la presentaba directamente como la próxima presidenta de los EEUU. Sin embargo, Winfrey ha negado varias veces que la Casa Blanca esté en sus planes, aunque en otras ocasiones, se ha dejado querer.
En junio rechazaba de forma contundente la idea en una entrevista en The Hollywood Reporter: "Nunca competiré por ocupar un cargo público, eso es algo bastante definitivo".
Su círculo cercano sí la ve con ganas y ella, gran conocedora de su propio tirón mediático ha jugado al despiste en varias ocasiones con la pregunta del millón. Anoche los periodistas no paraban de preguntárselo: ¿Consideraría una candidatura a la Casa Blanca?
Las respuestas variaban pero ninguna era una negativa directa: "Lo único que digo es que me alegro de haber sacado adelante ese discurso", se defendía tras emocionar al público al recoger el premio honorífico Cecil B. Demille.
Dos amigos cercanos a la popular presentadora han asegurado que Oprah está "pensando activamente" sobre la idea de presentarse, según informa la CNN.
En otra ocasión retuiteó en su cuenta un artículo que afirmaba que ella era la única opción segura para los demócratas en las elecciones de 2020. En otra entrevista reciente, sin mencionar a Trump, reconocía que nunca se había planteado competir por la Casa Blanca al carecer de experiencia política y de administración. "Ahora estoy pensando... Oh... vaya", en referencia al curriculum del actual inquilino del Despacho Oval.