El triunfo del izquierdista Andrés Manuel López Obrador en México va contra corriente de los comicios de los últimos años en el continente americano. En Brasil, un "impeachment" derrocó a Dilma Rousseff; Mauricio Macri acabó con el peronismo en Argentina; el millonario Sebastián Piñera terminó con las reformas sociales de Michel Bachelet en Chile; e Iván Duque rompió la tendencia izquierdista de Colombia.
Victorias de la derecha
En junio de 2018, el católico conservador, Iván Duque, con el 54% de los votos, se impuso al izquierdista Gustavo Petro en Colombia. El país no solo escogía una ideología política, sino la forma de su convivencia social. Duque siempre ha rechazado el acuerdo de paz que firmó el expresidente Juan Manuel Santos con las FARC , que le da a los exguerrilleros la impunidad y puestos en el gobierno a cambio del cese de violencia. Al elegir a Iván Duque, los colombianos se enfrentan al desafío de enmendar el acuerdo sin volver a encender el fuego en las calles.
En el 2017, los chilenos, cansados del estatismo de sus instituciones, las reformas de Bachelet y los escándalos de corrupción, cambiaron sus costumbres abstencionistas y se movilizaron a votar para castigar a la izquierda. Esto fue lo que, según analistas, hizo que el millonario Sebastián Piñera adelantara a su adversario socialdemócrata Alejandro Guiller nueve puntos y se quedara con la presidencia de Chile.
"No vuelven más", gritaban los votantes de Mauricio Macri en noviembre 2015, cuando el argentino, de la formación Cambiemos, puso fin al mandato de la familia Kirchner. Cristina Fernández gobernó el país desde 2007, como sucesora de su esposo, Nestor Carlos Kirchner, que ya había presidido el país por cinco años.
Al giro a la derecha en la región se le pueden atribuir causas como la caída de los precios de las materias primas, y el destape de la corrupción en los gobiernos. En el 2016 el Partido de los Trabajadores terminó sus cinco años de poder tras el juicio contra la expresidenta Dilma Rousseff. El "impeachment" provocó que el abogado Michel Temer, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño, se convirtiera en el presidente de los brasileños hasta el 2018.
A pesar de los grandes triunfos de la derecha, Obrador no está solo, porque en lo que va del 2018 la izquierda ha dado pasos para recuperar el terreno perdido. Costa Rica eligió como presidente al social demócrata Carlos Alvarado Quesada; Paraguay no se resistió a la tradición y el izquierdista Carlos Abdo Benitez se hizo con la presidencia; México le dio el triunfo a Manuel López Obrador, de MORENA; y todavía queda por ver lo que sucederá en las elecciones de Brasil y Venezuela que se celebrarán al final de este año.
Los líderes tradicionales de la izquierda en el continente celebraron el triunfo de Obrador. Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, considera que el resultado de las elecciones en México supone el triunfo de "la verdad por encima de la mentira y se renueva la esperanza de la Patria Grande"; Lenin Moreno, de Ecuador, Daniel Ortega, de Nicaragua, y el líder de los bolivianos Evo Morales también le extendieron mensajes esperanzadores al presidente electo el día de su victoria.
Resistir a toda costa
Algunos de los lideres de izquierda que siguen en el poder han sido acusados de recurrir a medidas antidemocráticas para mantenerse en sus cargos. Desde abril de este año el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ha sido el blanco de las críticas de organizaciones internacionales por el saldo de casi 300 muertos que ha dejado su violenta represión en las marchas en contra de su administración que comenzaron en abril de este año.
Además, el presidente venezolano, Nicolás Maduro se convirtió en un paria después de que en agosto 2017 convocara la Asamblea Nacional Constituyente para suplantar a la Asamblea Nacional, controlada por la oposición. Fue uno de los pasos más agresivos del chavismo para consolidarse en el poder durante una etapa de crisis humanitaria y económica en Venezuela. El presidente boliviano, Evo Morales, también fue criticado por intentar postularse para un cuarto mandato en 2019, a pesar del rechazo expresado por sus ciudadanos.
Los ciudadanos no solo han sufrido acoso físico en estos países. Miles de cubanos, por ejemplo, han emigrado a países como Estados Unidos, Rusia, Suriname y Holanda, huyendo de la miseria y la pobreza que ha provocado el mando de los Castro en Cuba.
América Latina se queda sin mujeres presidentes
Los cambios en la política no tienen solo que ver con ideologías. Las mujeres expresidentas: Cristina Fernández, de Argentina; Michelle Bachelet, de Chile; Dilma Rousseff, de Brasil; y Laura Chinchilla, de Costa Rica fueron remplazadas por hombres. La región, que sorprendía al mundo por su igualdad, solo cuenta con una mujer presidenta actualmente: Paula-Mae Weekes, de Trinidad y Tobago.
"Hay un problema muy serio en la región: tratar de avanzar y no permitir que haya retrocesos", dice Carmen Moreno, secretaria ejecutiva de la Comisión Interamericana de Mujeres.
"Es una realidad que tiene que ver con que de pronto las mujeres avanzaron mucho y asustaron a todos: hay una reacción en los partidos políticos que dicen '¿y por qué tienen que ser mujeres?'", agrega Moreno en declaraciones a BBC Mundo. Estos datos no dejan claro si el continente ha superado el machismo y sexismo.
La pugna entre la izquierda y la derecha parece no tener un ganador claro todavía. Es importante señalar que pese a los vaivenes en el tipo de política en los gobiernos, la región cuenta con un grupo de países que ha alcanzado grandes avances en la consolidación de la democracia y del Estado de derecho. Solo Cuba carece de las condiciones mínimas para ser considerada una democracia electoral.