En la noche de este miercoles fue detenido el ex viceministro de Energía de Venezuela Nervis Villalobos, sólo un mes después de haber sido excarcelado en circunstancias extrañas, a pesar de la orden de extradición a Estados Unidos cursada contra él en febrero. Villalobos está acusado de blanqueo de miles de millones de dólares procedentes del desfalco de la petrolera estatal PDVSA y de hombres de negocios de su país radicados en España a través de inversiones en propiedades inmobiliarias en Madrid y Marbella (Málaga).
Junto a Villalobos fue arrestado en la capital el argentino Luis Fernando Vuteff, yerno del líder de la oposición democrática Antonio Ledezma. Vuteff está casado con Antonietta Ledezma Capriles, hija de quien era alcalde metropolitano de Caracas hasta que se convirtió en preso político del régimen de Nicolás Maduro durante años, hasta su huida el pasado mes de noviembre a Madrid, vía Colombia. La detención de su yerno ha levantado las sospechas sobre quién está detrás de la financiación de la campaña mundial de Ledezma.
El líder opositor se ha defendido públicamente en la cadena de televisión EvTV de Miami, donde se encuentra para participar en un foro por la libertad de su país. "La gente tiene que estar segura de que éste que está aquí no tiene ninguna mancha", ha dicho, a las preguntas sobre el arresto de su yerno. "Hay una investigación en curso" en Madrid y "Dios colocará en la cima de nuestro cielo la verdad". El líder de Alianza Bravo Pueblo ha sugerido que la dictadura chavista está detrás de las acusaciones a Vuteff: "Me están cobrando toda la lucha política de 50 años" por la democracia.
Según Ledezma, desde que está "en el exilio" no ha hecho otra cosa que "asumir esta agenda para lograr más sanciones" a los jefes del régimen, impulsar la denuncia a Nicolás Maduro "ante la Corte Penal Internacional", e incluso "plantear, junto con otros ciudadanos, la activación del principio de intervención humanitaria" para que una fuerza militar internacional derroque al heredero de Hugo Chávez y "traiga la democracia".
La gira mundial de Ledezma
A su llegada hace un año a España, Ledezma inició una alianza llamada Soy Venezuela en campaña conjunta entre su partido Alianza Bravo Pueblo y el de María Corina Machado, ex diputada en la Asamblea Nacional, Vente Venezuela. Su plan, desarrollado desde entonces, era el de presionar internacionalmente para lograr apoyos a la causa democrática antichavista en el país caribeño.
Ledezma dio cominenzo a una gira internacional que lo llevó por toda Latinoamérica, EEUU, Canadá y a varios países europeos. Junto con Julio Borges, otra de las cabezas visibles de la oposición venezolana y líder de Primero Justicia, recogió el pasado diciembre en la sede de Estrasburgo del Parlamento Europeo el Premio Sajárov a la Libertad de Conciencia que concede anualmente la Eurocámara.
Expertos en la causa democrática venezolana consultados por este periódico y algunos de los promotores de aquella candidatura de Ledezma y el resto de los presos políticos y opositores se han mostrado "consternados" por la detención de Vuteff y por las implicaciones que podría tener sobre la fuente de financiación de los viajes y la campaña de Ledezma.
La urbanziación Columbus Hills en Marbella
Nervis Villalobos, Luis Fernando Vuteff y los otros dos detenidos han declarado este jueves ante el juez de guardia de los juzgados de plaza de Castilla de Madrid, el de instrucción 51, aunque esta causa de blanqueo la lleva el juzgado de instrucción 41. A todos ellos se les imputa, entre otros delitos, haber blanqueado fondos multimillonarios sacados de PDVSA a través de la promoción inmobiliaria Columbus Hills, en Sierra Blanca, a cinco kilómetros de Marbella.
Según las fuentes judiciales citadas por la agencia Efe, para la operación habrían utilizado la sociedad Columbus Properties One, una SOCIMI con sede social en Madrid, cuyas oficinas en la calle Orellana número 8 fueron registradas ante la presencia de los cuatro arrestados. Este periódico trató de ponerse en contacto con algún responsable de la compañía en la tarde de este jueves, y tras ser respondido al teléfono, quien contestó la llamada colgó de inmediato ante la pregunta de si las inversiones estaban seguras tras los registros.
El yerno de Ledezma es el administrador de Columbus, que supestamente proveía servicios de blanqueo a través de inversiones inmobiliarias y hoteleras que se investigan en esta operación, bautizada como Carabela. En total. han sido intervenidos más de 130 inmuebles en Madrid y Marbella, valorados en más de 72 millones de euros.
Acusaciones cruzadas
Precisamente este lunes, Rafael Ramírez, varias veces ministro de los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro en Venezuela, y antiguo jefe de Villalobos en el Ministerio de Energía en los años en que coincidieron (de 2004 a 2006), acusó gravemente a los líderes opositores democráticos venezolanos de haber hecho negocios con el régimen: "Todos han hecho contratos con Maduro. ¡Todos!".
Ramírez llegó a señalar incluso al expresidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que trata de mediar entre el régimen dictatorial bolivariano y los líderes opositores. Sin embargo, las declaraciones de Ramírez no fueron tomadas en consideración. Periodistas venezolanos consultados por EL ESPAÑOL lo señalaron como "uno de los que más se robaron" del país caribeño y que "ahora trata de hacerse con el antimadurismo para colocarse bien en la posible transición democrática y, así, lavar sus crímenes". Ramírez, exministro y exembajador del país caribeño ante la ONU es sospechoso de millonarias salidas de dinero durante sus 12 años al frente de PDVSA.
La extradición interruptus de Villalobos
El cabecilla de la trama desearticulada este miércoles en Madrid llevaba solamente un mes en libertad por orden del mismo juzgado 41 de Madrid que ahora mandó detenerlo a instancias de la Fiscalía Anticorrupción y en vista de nuevos indicios de blanqueo. Hasta ahora, se le investigaba por lavar siete millones de dólares transferidos al Banco Madrid, a los que habría que añadir el dinero que se invirtió en la promoción inmobiliaria marbellí.
Las transferencias de esos siete millones se produjeron, según los investigadores, entre octubre de 2011 y junio de 2012 a una sucursal en Lisboa (Portugal) del Banco Madrid a través de sociedades ligadas a él.
El pasado mes de febrero, el Consejo de Ministros aprobó la entrega a EEUU de Nervis Gerardo Villalobos Cárdenas y de Luis Carlos León Pérez, antiguo director de Finanzas de Electricidad de Caracas, subsidiaria de la estatal PDVSA, para ser enjuiciados en ese país por organización criminal y blanqueo de capitales.
La nota informativa del Gobierno, entonces del PP, explicaba que la extradición se concedía al ser sospechosos de haberse asociado entre 2011 y 2013 con directivos de PDVSA para solicitar sobornos a empresas a cambio de condiciones ventajosas en las licitaciones.
La extradiciión fue recurrida, el expediente no ha seguido curso y en el entretanto, dio tiempo a que Villalobos fuera excarcelado en septiembre por la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Madrid, que no vio "con suficiente claridad" que los hechos investigados por el juzgado 41 pudieran "desembocar en una condena penal".
En las mismas fechas, la Audiencia Nacional acordaba su puesta en libertad en la causa que investiga a Duro Felguera, su presidente, Ángel Antonio del Valle Suárez, y otras personas por presuntos delitos de corrupción internacional y blanqueo de capitales, tras detectarse pagos por comisiones y sobornos a políticos venezolanos.
Y todo a pesar de que la Audiencia madrileña admitía que Villalobos "tiene mucho dinero fuera de España" por lo que su riesgo de huida era claro. Además, Villalobos está procesado en Andorra, junto a otros altos cargos de PDVSA, por otro presunto expolio de 2.000 millones de dólares a la compañía.