La Fiscalía General de Estados Unidos presentará 29 cargos de "delito de odio" y pedirá la pena de muerte para Robert Bowers, el autor de la matanza de 11 personas perpetrada este sábado en una sinagoga de Pittsburg (Pensilvania, EEUU), en la que hubo otros seis heridos, tal como han informado fuentes oficiales.
"Estos presuntos crímenes son reprobables y absolutamente repugnantes de acuerdo con los valores de nuestra nación. Por ello, el Departamento de Justicia presentará cargos de delito de odio, así como otros, contra el acusado, incluyendo cargos que podrían llevar a la pena de muerte", declaró el fiscal general de EEUU, Jeff Sessions, en un comunicado.
De esta manera, Robert Bowers, quien resultó detenido tras disparar a las 10.00 horas del sábado de manera indiscriminada contra los parroquianos de la sinagoga al tiempo que gritaba "¡Todos los judíos debían morir!", se enfrentará a la pena máxima en los tribunales.
El jefe de la cartera de Justicia condenó un acto "vil" en el que fallecieron "once personas inocentes" cuando participaban en un oficio religioso en la sinagoga de la Congregación del Árbol de la Vida. "El odio y la violencia en función de la religión no tienen lugar en nuestra sociedad", consideró Sessions.
El anuncio del Departamento de Justicia coincide con la línea marcada horas antes por el presidente Donald Trump, quien reclamó el endurecimiento de la leyes relacionadas con la pena de muerte.
"Hay que dibujar una línea y decir con fuerza 'hasta aquí, nunca más'", señaló el presidente durante un acto de campaña celebrado en la localidad de Murphysboro, en Illinois.
A lo largo del día, la Casa Blanca sopesó la posibilidad de cancelar tanto este evento como otro organizado por asociaciones agrícolas, que tuvo lugar unas horas antes en Indiana, pero finalmente el presidente optó por participar en ambos eventos.
"No quiero que tengáis que cambiar vuestras vidas por alguien que está enfermo y es diabólico [...]. Tenemos nuestras vidas, tenemos nuestras agendas y nadie nos las va a alterar", sostuvo Trump durante el mitin.
"Terrible, es algo terrible", le dijo el presidente Trump a la prensa. "Ver que esto sucede una y otra vez, durante tantos años, es una pena". "Si hubieran tenido protección adentro, tal vez podría haber sido una situación diferente", dijo manteniendo su apoyo al libre acceso a las armas. Este ataque puede ser "el más letal contra la comunidad judía en la historia de Estados Unidos", según lo describió la Liga Anti-Difamación del país.
El estado de Nueva York desplegó agentes de policía para proteger las sinagogas de esa ciudad.
Quién es el agresor
El sospechoso de cometer el ataque ha sido identificado como Robert Bowers, de 46 años. Es un hombre blanco y de complexión robusta. La Fiscalía de Estados Unidos ya lo ha acusado formalmente del ataque y pedirá la pena de muerte.
Los servicios de emergencia llegaron al lugar alrededor de las 10:00 hora local (16.00 hora peninsular española), en plena celebración del shabat judío, durante un Brit Mila (bautismo judío) de un bebé.
Hay cuatro agentes heridos, dos policías de Pittsburg y dos miembros de los SWAT, que fueron alcanzados por disparos del atacante antes de que pudiera ser detenido. Los cuatro están ingresados en hospitales en situación estable.
Hay otras dos personas heridas, que sufrieron el ataque de Bowers, una mujer de 61 años y un hombre de 70, con heridas de bala en el torso que lo mantienen en estado muy grave. El director de Seguridad Pública de Pittsburgh, Wendell Hissrich, describió la escena como "horrible, una de los peores que he visto".
La sinagoga Árbol de la Vida fue fundada hace ya más de 150 años, se encuentra en el área de Squirrel Hill, en el este de Pittsburgh. Jeff Finkelstein, presidente de la Federación Judía de Greater Pittsburgh, dio cuenta a la prensa de que cada sábado se reúnen en la sinagoga entre 50 y 60 personas.
Según fuentes del FBI citadas por la BBC, no había constancia de que Robert Bowers estuviese fichado por las autoridades. En todo caso, el sospechoso -que sigue hospitalizado por las heridas de bala recibidas durante el asalto policial que logró neutralizarlo- había publicado contenido antisemita en la red social Gab con el nombre de usuario "onedingo".
En la misma mañana del sábado había publicado un ataque verbal al grupo de ayuda para refugiados Sociedad de Ayuda al Inmigrante Hebreo (HIAS, por sus siglas en inglés) y dijo que no podía "sentarse para ver cómo matan a mi gente". Y, a modo de amenaza, escribió: "Que se jodan sus puntos de vista, voy a entrar".
Anteriormente, había publicado críticas a Donald Trump, presidente de EEUU, por su apoyo a la comunidad judía: "Trump es un globalista, no un nacionalista", escribió, rechazando que sea creíble su eslogan "Make America Great Again" (hacer de nuevo grande EEUU): "No hay #MAGA mientras exista una infestación de judíos".