Las hermanas saudíes encontradas muertas en un río de Nueva York la semana pasada estaban vivas cuando cayeron al agua, según revelaron fuentes que pidieron el anonimato a la cadena de televisión CNN.
Un oficial dijo al medio de comunicación que se ha hallado agua en los pulmones de Rotana y Tala Farea, de 22 y 16 años, lo que indicaría que estaban respirando cuando cayeron al río Hudson, donde fueron encontradas.
¿Suicidio?
Agregó que las autoridades siguen investigando, pero creen por el momento que el fallecimiento vino motivado por un suicidio de las jóvenes, cuyos cuerpos fueron hallados completamente vestidos en las orillas del río Hudson hace ocho días, atados el uno al otro en tobillos y cintura con una cinta aislante.
Aunque todavía se trata de aclarar lo sucedido, dado que Rotana y Tala desaparecieron de la ciudad en la que residían en el estado de Virginia (EE.UU.) el pasado mes de agosto, la fuente reveló a la CNN que por el momento no se ha encontrado ninguna prueba de que fueran víctimas de un crimen.
Habían pedido asilo político
Los detectives siguen analizando la muerte de las jóvenes, cuyo caso recibió una notable atención de los medios de comunicación estadounidenses por las extrañas circunstancias y tras conocerse que las fallecidas, de nacionalidad saudí, habían pedido asilo político en EEUU poco antes de morir.
Las pesquisas han revelado que las hermanas, según lo informado por el oficial anónimo a esta televisión estadounidense, no querían volver a Arabia Saudí, algo que las autoridades del país árabe habían ordenado a la madre de las jóvenes al conocer la petición de asilo.
Por su parte, el consulado de Arabia Saudí informó en un comunicado de que está "siguiendo de cerca junto con autoridades locales la investigación" de la muerte de las jóvenes, a la vez que dijo estar esperando los informes forenses que recalcó "aún no se han finalizado".
Asimismo, en el texto se asegura que el consulado ha nombrado a un abogado para seguir el caso y que ha prestado su ayuda y apoyo a los familiares de las víctimas, que detalló eran estudiantes que se encontraban en EEUU acompañando a su hermano.
Las jóvenes habían llegado a EEUU desde Arabia Saudí en 2015 junto con su madre y se asentaron en el estado de Virginia, aunque la Policía apuntó que dejaron la residencia familiar y se trasladaron a un albergue tras otra desaparición el pasado mes de diciembre.