"Muchos dan hoy la paz por hecho, pero no es así". La canciller alemana, Angela Merkel, reclamó este domingo ante el mundo, ante los aliados, ante los bloques... lucha por la paz mundial: hacerlo en todos los frentes, no alentando confrontaciones, gestionando flujos migratorios, aplicando la solidaridad, evitando enfrentamientos comerciales. Merkel, junto al presidente francés, Emmanuel Macron, y el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, inauguraban juntos en París un foro global por la paz, amenazada desde diferentes flancos.
En su intervención ante el plenario del Foro de París por la Paz, organizado por Macron e inaugurado en el día del centenario del Armisticio de la I Guerra Mundial, Merkel llamó a fomentar el multilateralismo y la gobernanza mundial.
Macron, por su parte, se preguntó si visto desde el futuro la reunión este domingo de 84 jefes de Estado y de Gobierno bajo el Arco del Triunfo, con motivo de esta conmemoración "será la foto de un último momento de unidad antes de un nuevo desorden mundial".
Todo, tras constatarse que Donald Trump, presidente de EEUU, había decidido finalmente ausentarse del foro. Trump prefirió ir a visitar el cementerio de los soldados estadounidenses caídos en la Gran Guerra.
Alemania, origen de las dos contiendas
La canciller destacó la importancia para su país de estar invitado a esta instancia y eso pese a que, recordó, estuvo en el origen de las dos guerras mundiales, por la falta de visión global de quienes gobernaban en aquellos momentos.
Para Merkel, este tipo de encuentros deben servir para que la paz no se dé por conseguida, sino para mantener la guardia porque conservarla es "una batalla de cada día". Ilustró las amenazas al referirse a la situación en Siria y Yemen, donde se vive "la catástrofe humanitaria más horrible del mundo en este momento".
Merkel hizo un llamamiento para "no dejarse llevar por los intereses nacionales", y alertó de que no se han sacado las lecciones de las guerras mundiales, como ponen de manifiesto los 222 conflictos violentos que se vivieron el año pasado o los 65,8 millones de refugiados que hay en el mundo, más de la mitad de ellos niños.
La mandataria alemana reconoció que desde esos dos grandes conflictos se han hecho avances, como la creación de la ONU, sin la cual, pese a sus problemas, "el mundo sería peor", y la declaración Universal de los Derechos Humanos. "Creo que ahora no se podrían lograr estos avances que se hicieron tras el horror de la guerra. Ahora sería más difícil", comentó antes de insistir en su defensa del multilateralismo, porque "las amenazas son comunes a todos".
Macron, como anfitrión, también insistió en que hay que aprender las lecciones de las dos guerras mundiales y alertó de que el mundo actual sufre amenazas similares a las que había cuando se declararon.
Esos peligros, relató, "ponen en duda el horizonte de paz en el que muchos creen". Para contrarrestarlo, justificó que se haya creado este foro que se celebrará cada año "para buscar soluciones para que la paz avance".
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, igualmente lanzó una advertencia porque a su juicio se ha puesto en marcha un "engranaje" geopolítico similar al que desembocó en las dos contiendas mundiales. "Muchos elementos de hoy me parece que toman la misma dirección que a principios del siglo XX y que en los años treinta, y dejan entrever un engranaje invisible", aseguró.