Las cámaras legislativas del Estado de Nueva York han aprobado este jueves un proyecto de ley que convierte la 'pornovenganza' en delito, es decir, publicar vídeos y fotos íntimas de una persona en internet sin su consentimiento y con la intención de causar daño emocional, físico o económico.
La propuesta fue presentada por la nueva senadora Mónica Martínez, quien destacó que, al igual que la violencia doméstica, la 'pornovenganza' "puede ocurrir en cualquier familia".
Así, Nueva York se unirá a otros 41 estados y al Distrito de Columbia que ya legislaron al respecto. Solo queda que el gobernador, Andrew Cuomo, que dijo sobre la 'pornovenganza' que "esta repugnante e insidiosa conducta, que persigue a las víctimas toda su vida, no tiene lugar en Nueva York", refrende la ley con su firma.
La ley de la 'pornovenganza' estipula que la persona que cometa el delito podrá ser condenada a un año de cárcel o hasta tres años en libertad bajo supervisión y mil dólares de multa.
Igualmente, a diferencia de los otros estados, otorgará el derecho a las víctimas de acudir a un tribunal civil o criminal para reclamar daños sin necesidad de haber presentado cargos contra el autor del delito o haya una condena.
En caso de que la víctima sea menor de edad, el caso se tratará exclusivamente en un tribunal de familia. Asimismo, podrán obtener una orden judicial para que las imágenes sean eliminadas de la web.
Los senadores y asambleístas estatales indicaron en una rueda de prensa conjunta que miles de personas se han convertido en víctimas de 'pornovenganzas' por parte de parejas, exparejas, familiares o conocidos que han subido a una o varias páginas de internet imágenes privadas.
Además, destacaron que "esas acciones maliciosas" pueden arruinar la vida personal y profesional con la pérdida del empleo o futuras relaciones de pareja. También pueden crear problemas de salud mental, ya que algunas personas han llegado incluso al suicidio.
Edward Braunstein, autor del proyecto en la Asamblea, ha declarado que "es un problema generalizado que a menudo provoca que las víctimas sean amenazadas con asalto sexual, acosadas, hostigadas o despedidas de sus empleos".
La Asamblea y el Senado han trabajado con activistas y grupos como el Cyber Civil Rights Initiative para lograr un consenso que hiciera realidad la legislación.
La abogada Carrie Goldberg, miembro del consejo asesor Cyber Civil Rights Initiative recordó que fue víctima de 'pornovenganza' por su expareja y, al no encontrar apoyo legal, decidió comenzar su lucha para que otras víctimas contaran con apoyo en Nueva York.
"Comencé mi firma en 2014 para luchar por las víctimas de agresión sexual y acoso porque no pude encontrar un abogado cuando estaba bajo el ataque de una expareja vengativa que me amenazó con difundir mis fotos", recordó.
La promotora del proyecto, Mónica Martínez, reveló haber conocido a una niña víctima de este delito y señaló que esas personas son "humilladas y acosadas" por quienes ven las fotos" y que por ese motivo, con esta ley "aseguraremos justicia" para esas personas.