El viceprimer ministro italiano, Matteo Salvini, ha rechazado este martes el desembarco, en la isla de Lampedusa, de un barco de rescate de la ONG italiana 'Mediterranea Saving Humans' con 49 inmigrantes a bordo, incluidos 12 menores. Este nuevo caso vuelve a poner en el foco las políticas migratorias y la actuación de los Gobiernos europeos en el Mediterráneo.
El barco "Jonian Sea", perteneciente a la ONG del activista italiano, Luca Casarini, rescató a los inmigrantes este lunes cuando la lancha de goma con la que intentaban llegar a Europa se hundía, según informaron a través de Twitter. En ese momento, la embarcación estaba a unas 49 millas náuticas (alrededor de 78 kilómetros) de la costa de Libia.
A pesar de que la Guardia Costera de Libia estaba a punto de intervenir, tal y como se indicó a la ONG, decidieron dirigirse a Italia, desoyendo así la solicitud de no entrar en aguas italianas de la Guardia di Finanza, como explica el periódico italiano Corriere della Sera. Por ese motivo, Salvini ha acusado a Mediterranea de "ser cómplice de la inmigración ilegal".
Finalmente decidieron atracar en el puerto de Lampedusa, una pequeña isla situada entre Túnez y Sicilia (muy cerca de Malta). El alcalde de la isla, Totò Martello, que se ha posicionado en varias ocasiones en contra de la política de Salvini de prohibir la llegada de migrantes, ha declarado que "el barco es italiano y nuestro puerto está abierto y listo para recibirlo. Los migrantes rescatados en el mar deben ser desembarcados, tratados y alimentados".
Embarcación italiana
Justamente por llevar una bandera italiana y ser un barco italiano, la ONG ha podido sortear las trabas de su gobierno. Al contrario de casos anteriores en los que los barcos llevaban la bandera holandesa o la española, esta vez el Gobierno italiano no puede pedir ayuda a Europa ni ordenar a la organización que atraque en el país del que habían zarpado los migrantes (Libia).
Salvini, que cuando los migrantes iban a ser rescatados aseguró que "no hay peligro de hundimiento o riesgo para las personas a bordo", contrariamente a lo que mostró la ONG con diferentes fotos, ha afirmado que "pueden ser curados, alimentados, vestidos, se les puede dar todo tipo de bienes de confort, pero hasta donde yo sé, con mi permiso, no pondrán un pie en Italia".
El Ministerio del Interior, dirigido por él ha aprobado nuevas medidas sobre migración y ha ordenado a los jefes de la Policía, la Armada y los guardacostas que hagan todo lo que esté en su mano para prevenir "la entrada ilegal de inmigrantes en territorio nacional", como recoge Europa Press.
El líder de La Liga, asegura que su política migratoria de puertas cerradas ha contribuido a una caída brusca tanto de las llegadas como de las muertes en el mar. Sin embargo, impedir que los inmigrantes salgan de Libia o que sean devueltos al país africano es una medida controvertida porque están expuestos a violaciones de Derechos Humanos.
Por su parte, el viceprimer ministro junto con Salvini y líder de Movimiento 5 Estrellas, Luigi Di Maio, ha afirmado que están verificando las condiciones de las personas a bordo, entre las que se encuentran 12 menores, "porque los rescates y las vidas humanas son nuestra prioridad".
Sin embargo, también ha apuntado que "una vez más, esta ONG no ha respetado las normas. La novedad es que enarbola la bandera italiana y esta puede ser una manera de respetar mejor las reglas".
El nuevo 'caso Diciotti'
Este nuevo suceso se produce unos días antes de la votación que llevará a cabo el Senado 'caso Diciotti' en el que se solicita la autorización para proceder contra Salvini por abuso de poder y detención ilegal tras haber bloqueado en agosto, durante cinco días, la nave militar italiana Diciotti con 177 migrantes a bordo. A ese respecto, Di Maio ha asegurado que este "no será un nuevo caso Diciotti".
A pesar de que el Movimiento 5 Estrellas votó a finales de febrero en contra de juzgar a Salvini, la decisión final la tomará la Cámara Alta italiana el próximo 24 de marzo.