Fuerzas de seguridad retomaron el control de la sede de la Asamblea Nacional en Ecuador (Parlamento) después de que cientos de manifestantes indígenas asaltaran el edificio al grito de "¡fuera Moreno fuera!".
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) había rechazado la aplicación de una restricción a la movilización de personas en algunas zonas de su país, en lo que denominaron un "toque de queda" que consideraron como una medida dictatorial ante las protestas contra el Gobierno.
Con este tipo de decisiones el Gobierno demuestra "su debacle y la incapacidad de las autoridades para responder frente a la movilización social y el acumulado de acciones de resistencia" en todo el país, señaló la Conaie en un comunicado difundido esta noche.
El Gobierno del presidente Lenín Moreno emitió este martes un decreto por el que restringe la libertad de tránsito y movimiento de ciudadanos en áreas aledañas a instituciones públicas e instalaciones estratégicas en horario de 20.00 a 5.00 horas, de lunes a domingo.
La Policía motorizada, apoyada por unidades caninas y una guardia montada logró establecer unos cuatro o cinco cercos de seguridad en la plaza principal que da acceso a la sede parlamentaria.
Con el uso de la fuerza y gases lacrimógenos los efectivos policiales, a los que se sumaron militares, desalojaron a los manifestantes que se habían atrincherado en la entrada principal de la Asamblea enarbolando banderas tricolores y de las organizaciones de base.
La actividad en la sede parlamentaria se encontraba suspendida este martes después de que en la víspera se produjeran altercados en las inmediaciones que obligaron a desalojar la Cámara.
La sede se encuentra cerca de un parque de Quito que servía este martes de lugar de concentración a unos 10.000 miembros de colectivos indígenas, en la víspera de una marcha con la que esperan la derogación de recientes medidas económicas o la salida del presidente Lenín Moreno.
La toma de la sede parlamentaria se realizó en la calle Yaguachi de Quito, donde los manifestantes alcanzaron la plaza central compuesta por varios peldaños, según constató Efe.
El nutrido grupo había roto el cerco de seguridad en la entrada principal del edificio y posteriormente un grupo de dirigentes, vestidos con ponchos y bastones llegaron al lugar donde se encontraba la fuerza pública, informó la emisora local Radio Calle.
Los dirigentes solicitaron a los participantes en la acción que mantuvieran la calma y no provocaran innecesariamente a las fuerzas de seguridad, y llegaron al lugar con las manos en alto.
En los alrededores del edificio del poder legislativo se escucharon en las últimas horas varias detonaciones, procedentes de la aledaña Avenida 6 de Diciembre, a donde llegaron vehículos blindados antimotines.
La radio local informó de que en el parque donde se habían agrupado los indígenas se registraban enfrentamientos con fuerzas de seguridad.
Los disturbios y protestas en diferentes puntos del país se suceden desde el pasado jueves a raíz de medidas económicas adoptadas por el Gobierno como la retirada del subsidio a los combustibles.
El mandatario ecuatoriano abandonó el lunes de manera inesperada la sede presidencial, el Palacio de Carondelet, en el casco histórico de Quito, para viajar a Guayaquil, donde ha establecido el gobierno de manera provisional a la luz de la situación de seguridad que se vive en el país.
El presidente ecuatoriano censuró anoche en un mensaje a la nación que elementos del anterior Gobierno de Rafael Correa buscan desestabilizar el país en un "intento de golpe de Estado".
Moreno agregó que hay "individuos externos pagados y organizados" para utilizar la movilización de los indígenas con fines de saqueo y desestabilización.
La pasada madrugada un grupo de asaltantes irrumpió en la sede de la Contraloría General del Estado en Quito donde provocaron destrozos, tras lo cual la Fiscalía y el Consejo de la Judicatura anunciaron que suspendían sus actividades este martes.