El eurodiputado Leopoldo López Gil ha exigido "la salida del régimen del dictador Nicolás Maduro" y ha reclamado al Parlamento Europeo que ponga su granito de arena "en revertir la continua violación de derechos humanos" en Venezuela. Según el parlamentario popular, la Eurocámara puede "y debe" hacerlo, liderada por el recién ratificado por la misma, el Alto Representante" de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell.
"Según Naciones Unidas, uno de cada cinco venezolanos ha salido del país" en los últimos años asfixiado por "los tentáculos del dictador" y la profunda crisis que ha provocado en el país su política. Además, en declaraciones a este periódico, López Gil ha dicho "temer por la vida de los parlamentarios perseguidos" y ha denunciado que en los últimos días "se ha desatado la siguiente fase de la ofensiva de Maduro, un régimen de terror".
Y es que "son numerosos los diputados de la Asamblea Nacional", dominada por la oposición democrática con una mayoría cualificada de dos tercios, "que están siendo perseguidos, encarcelados o han tenido que exiliarse" recientemente. Ya este fin de semana, Juan Guaidó, presidente interino de Venezuela -"reconocido como tal por este Parlamento", ha recordado López Gil en el Hemiciclo de Estrasburgo- denunció que "el empeño de Maduro es acabar con la Asamblea Nacional".
"Les ha sido retirada la inmunidad parlamentaria", ha clamado el eurodiputado de origen venezolano, "para evitar que ellos y Guaidó continúen su lucha por recuperar la democracia".
Los perseguidos
López Gil es padre del líder opositor Leopoldo López, perseguido por Maduro y quien fue su más famoso preso político durante años. Hoy, el dirigente de Voluntad Popular -partido de Guaidó- sobrevive a la persecución chavista alojado en la residencia del embajador español en Caracas, Jesús Silva, con el acuerdo del propio Borrell cuando era ministro de Exteriores.
Por su especial conocimiento de lo que es la persecución tras no verse con su hijo durante años, López Gil denuncia a EL ESPAÑOL que "la maniobra está siendo grotesca" porque "están utilizando no sólo el aval del Tribunal Supremo, que ya se sabe que está sometido al régimen, sino también de la llamada Asamblea Nacional Constituyente, un órgano absolutamente ilegítimo" y no reconocido por la comunidad internacional.
López Gil ha tachado de "vergonzoso" que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU haya elegido como miembro a la Venezuela chavista. "Esto convierte la institución en títere de tiranos torturadores". Porque a partir de ahora, con Maduro representado en la organización, se podrán "deslegitimar los mandatos e investigaciones de sus crímenes de lesa humanidad".
En cada intervención ante la Eurocámara, López Gil se erige en la voz de los ciudadanos latinoamericanos dentro de la Unión Europea, en un momento convulso del subcontinente. Por eso ha reclamado "la elevación de las sanciones" que ya impuso la Unión "a los responsables del irrespeto total a la dignidad de su pueblo", los responsables de la dictadura de Nicolás Maduro.