El presidente de EEUU ha empezado el año en el que se jugará la reelección con un golpe de efecto en el tablero internacional que tendrá consecuencias imprevisibles. El asesinato del comandante Qasem Soleimaní en venganza por el ataque a la embajada de EEUU en Bagdad ha desatado un conflicto entre Donald Trump y el ayatolá Jameneí en el que ambos líderes se han intercambiado amenazas de máxima intensidad sin descartar el estallido de un conflicto bélico.
El líder supremo de la Revolución Islámica de Irán ha jurado venganza contra los que asesinaron al comandante Soleimaní. "Su fallecimiento no detendrá su misión, pero los criminales que han manchado sus manos con la sangre del general y de otros mártires en el ataque deben esperar una dura venganza", agregó el líder en un comunicado
En la misma línea, el presidente Hasan Rohaní ha prometido una alianza de naciones para responder a EEUU: "Sin duda, la gran nación de Irán y las otras naciones libres de la región se vengarán por este horrible crimen".
"Dura respuesta", "consecuencias", "decisiones apropiadas", es la retórica que de momento ha empleado Teherán para avanzar cuál será su respuesta, aún por concretar. A las reacciones oficiales hay que sumar la ira desata en las calles tras conocer la operación con drones de EEUU: miles de manifestantes han salido a las calles para reclamar "venganza" a su Gobierno, según han informado los medios oficiales.
Por su parte, Trump ha insinuado un posible conflicto bélico con un críptico tuit en el que afirma que "Irán nunca ganó una guerra, pero jamás perdió una negociación". Se trata de la primera y única reacción oficial del presidente estadounidense, que se ha dedicado a retuitear mensajes de apoyo a su "sólida política" en Oriente Próximo mientras destacados líderes internacionales mostraban su preocupación por las consecuencias de la arriesgada maniobra.
Más allá de las amenazas, el Gobierno de EEUU ha anunciado este mismo viernes que enviará miles de soldados a Oriente Próximo. Según la CNN y NBC, el Ejército podría desplegar hasta 3.500 tropas en la región. La decisión aún no ha sido anunciada oficialmente por el Pentágono. Según el diario The Wall Street Journal, el despliegue podría producirse este fin de semana.
Esta misma semana, EEUU ya envió 750 soldados a la zona en respuesta al asalto de la embajada estadounidense en Bagdad por parte de cientos de personas.
Según el Pentágono, Soleimani desarrollaba "planes para atacar a los diplomáticos y miembros del servicio estadounidenses en Irak y en toda la región". La nota responsabilizó a Soleimani y a la Fuerza Quds por "la muerte de cientos de estadounidenses y de miembros del servicio de la coalición, y de las heridas de miles más".
"Estados Unidos continuará tomando todas las medidas necesarias para proteger a nuestra gente y nuestros intereses en cualquier parte del mundo", agregó el comunicado, que precisa que este golpe "tenía como objetivo disuadir futuros planes de ataques iraníes".