Una mujer de 63 años ha sido rescatada en un domicilio de Río de Janeiro (Brasil), donde se encontraba en situación de esclavitud. La mujer trabajó como empleada doméstica durante 41 años sin percibir salario y sin derecho a vacaciones y ni siquiera recibió tratamiento tras contraer la Covid-19, según informaron los medios locales.
La mujer fue rescatada el pasado lunes en el marco de la Operación Rescate, que busca liberar a personas que se encuentran en condiciones de esclavitud en Brasil. La familia para la que trabajó durante 41 años la dejaba en una habitación minúscula y sin luz en la parte trasera de la casa.
Mientras no se encontraba en la casa, la anciana recogía latas y otros objetos de la calle, pero el dinero que conseguía tras la venta era también colectado por la familia, que incluso le arrebataban el dinero que recibía de una ayuda estatal.
Cuando los inspectores de trabajo vieron por primera vez a la víctima, estaba sucia después de regresar del depósito de chatarra, donde había ido a vender las latas que estaba recolectando, aún no había comido y estaba muy agitada, confusa y con problemas de audición, según los fiscales del Ministerio de Trabajo.
Los vecinos interrogados explicaron que en ocasiones se producían también agresiones físicas y verbales contra la víctima, incluido un intento de ahorcamiento, que la víctima negó posteriormente.
Más de 100 operaciones
Como este, existen en Brasil cientos de casos. Las autoridades brasileñas han rescatado en los últimos días a 110 personas, entre ellas adolescentes, indígenas, ancianos y personas con deficiencia, que trabajaban en condiciones análogas a la esclavitud.
"Ocurrieron rescates en todas las cinco regiones del país, en las más diversas actividades y el perfil de los rescatados es lo más variado posible", señaló en una rueda de prensa el subsecretario de Inspección de Trabajo del Ministerio de Economía, Romulo Machado e Silva.
Asimismo, durante los operativos realizados en 23 de los 27 estados brasileños fueron identificados otras 486 personas que no contaban con el debido registro de trabajo y tendrán ahora asistencia jurídica y orientación de derechos para que tengan sus contratos formalizados.
La Operación Rescate, iniciada la pasada semana y que seguirá en marcha en los próximos meses, es el mayor operativo conjunto ya realizado contra la esclavitud moderna y cuenta con cerca de 500 profesionales, entre ellos agentes de seguridad, policías y fiscales.
El primer balance del año sobre personas rescatadas en condiciones análogas a la esclavitud coincide con la celebración del Día Nacional de Combate al Trabajo Esclavo en Brasil, instituido hace doce años en el país tras el asesinato de un grupo de fiscales cuando ejercían su labor.