El ministro de Defensa de Rusia, Sergei Shoigu, ha insinuado que el país podría estar estudiando la posibilidad de clonar a un grupo de guerreros enterrados hace más de 3.000 años bajo el suelo de Siberia, usando ADN preservado.
Se trata del antiguo cementerio de guerreros nómadas de Tunnug, muchas veces enterrados con sus caballos, que se encuentra en un área conocida como el Valle de los Reyes, en Tuva.
El lugar está rodeado de misticismo. Cuando Shoigu, de 65 años, inició las excavaciones arqueológicas en el lugar, hace tres años, los científicos incluso reclutaron a un chamán moderno para asegurarse de que las excavaciones no enfadaran a los espíritus.
"Por supuesto, nos gustaría mucho encontrar materia orgánica. Creo que entienden lo que vendría después de eso. Sería posible sacar algo... como la oveja Dolly", dijo Shoigu, uno de los ministros más cercanos al presidente Valdimir Putin, en una transmisión de Zvezda TV.
Sin dar más explicaciones sobre la investigación planificada para el lugar, anadió que "en general, sería muy interesante".
Las tumbas en las que están enterrados los guerreros están en conservadas en permafrost y, según los científicos, la materia orgánica debería conservarse allí. "Se han confirmado muchas cosas, pero queda mucho por hacer", ha dicho el ministro.